Tras haber rendido protesta como sustituto de la regidora panista Nadya Edith Rangel Zavala, quien solicitó licencia hace unas semanas, el dirigente municipal de ese partido y nuevo edil capitalino, José Antonio Zapata Meraz, se ha convertido en un impulsor de la cultura de las Juanitas, al violentar ética y moralmente la equidad de género” afirmó la regidora Eloísa Lan-daverde Trejo, del PANAL.
“De acuerdo con el Artículo 135 de la Ley Estatal Electoral, los partidos políticos deben promover la equidad de género, no sólo en momentos electorales, sino en todo momento; y esta acción demuestra que en el PAN van en contra de ese precepto”, declaró.
El pasado jueves 13 de noviembre, el ahora regidor panista Zapata Meraz rindió protesta como regidor en sesión de Cabildo, a fin de asumir el escaño que se encontraba vacío por la licencia definitiva de Nadya Edith Rangel. Esto sucedió luego de una controversia en los tribunales electorales.
Una vez que este viernes el panista se presentó en los cubículos de los regidores en la Unidad Administrativa Municipal, Landaverde encabezó una ardiente defensa de los derechos de las mujeres y de las políticas a favor de su empoderamiento, al afirmar que la presencia de Zapata Meraz violenta la equidad de género.
“La cultura de las Juanitas se repite en San Luis, pero ahora se ve replicada en la cultura de los Pepitos”, subrayó y agregó: “Con todo respeto a la sentencia del tribunal, Zapata debió declinar su toma de protesta para permitir que llegara una mujer a ese espacio.”
Dijo que esta situación sentará lamentablemente un precedente para que en lo futuro los partidos políticos, como el PAN, promuevan candidaturas de mujeres y luego las suplan por hombres, lo que es totalmente un símil de la cultura de las Juanitas.
“Con esa actitud el regidor Zapara Meraz estaría demostrando su lado misógino”, subrayó la regidora Landaverde.
