Una anciana ha muerto hoy en Bamako contagiada por ébola, lo que la convierte en el tercer caso confirmado de víctimas mortales en este país, donde el virus parece extenderse sin control.
Se trata de una anciana que asistió al funeral de un imán fallecido recientemente y de quien se sospechaba que transmitió el virus a un enfermero de la capital que le trató y que murió el pasado martes.
Con la muerte de la anciana parecen confirmarse las sospechas de que el imán, a quien se enterró sin que se llegara a descartar si padecía o no la enfermedad, tenía ébola.
Este hombre que venía de Guinea visitó varios centros médicos antes de llegar a Bamako, donde falleció, y además se le realizaron los rituales funerarios en una mezquita de la capital, por lo que se piensa que el número de infectados por contacto con el fallecido puede ser alto.
Por el momento, se sabe que la anciana participó en el funeral del imán, y ayer, miércoles por la noche, al ver que su estado no mejoraba, fue trasladada al Hospital Gabriel Toure donde murió.
Las pruebas que se realizaron al cadáver para ver si era transmisora del virus han dado positivo.
El pánico que se desató el martes, tras conocerse la segunda muerte de ébola en menos de 20 días en Mali, se ha incrementado hoy entre la población.
En el hospital donde murió la anciana, tanto los pacientes como enfermeros, matronas y los propios médicos, huyeron corriendo del centro, mientras que a un número indeterminado de personas que se encontraban en el interior del edificio se les ha prohibido salir y han sido puestas en cuarentena.
El personal de la exclusiva Clínica Pasteur de Bamako donde trabajaba el enfermero que falleció el martes también se encuentra en cuarentena junto a varios cascos azules de la Misión de la ONU en Mali (Minusma).
Mientras el gobierno, al que muchos acusan de negligencia, intenta a través de los medios de comunicación sensibilizar a la población, los rumores corren como la pólvora y los supuestos casos de ébola a través de las redes sociales y por mensajes de texto se suceden los unos a los otros.
El primer caso de ébola en Mali se anunció el pasado 24 de octubre cuando una niña de dos años falleció tras volver a su país también desde Guinea, uno de los focos infecciosos junto a Liberia y Sierra Leona. Según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) , la epidemia de ébola en África Occidental ha alcanzado los 14 mil 098 contagios, de los cuales 5 mil 160 han sido mortales.
ONU: Hay un ‘tremendo progreso’ en lucha contra ébola
Anthony Banbury, director de la Misión de la ONU para la Respuesta de Emergencia contra el Ebola, dijo que han quedado descartados, de momento, algunos de los peores escenarios de crecimiento exponencial en el número de víctimas
La ONU cree que se está haciendo un «tremendo progreso» para combatir el ébo-la en AfricaOccidental, pero pidió no bajar la guardia para poder erradicar una epidemia que ha causado unos cinco mil muertos.
«El ébola es un enemigo aterrador y no le ganaremos persiguiéndolo. Tenemos que ir por delante de él», afirmó hoy ante la Asamblea General de la ONU el jefe de una unidad especial de Naciones Unidas para combatir la epidemia, Anthony Ban-bury.
Banbury asumió el pasado 19 de septiembre la dirección de la Misión de la ONU para la Respuesta de Emergencia contra el ébola (UNMEER) , creada especialmente para intentar coordinar los esfuerzos internacionales en las áreas más afectadas.
En su exposición, Banbury dijo que han quedado descartados, de momento, «algunos de los peores escenarios de crecimiento expo-nencial en el número de víctimas» que se habían hecho. En diciembre pasado, la Organización Mundial de la Sa-lud (OMS) llegó a decir que a comienzos de diciembre el número de casos por semana alcanzaría un rango de entre cinco mil y 10 mil infectados.
Banbury dijo que ha habido una «significativa mejora» en muchas zonas afectadas, como en el área de Monrovia, la capital de Liberia, el país que tiene el mayor número de infectados.
Recordó que la OMS se había fijado como meta para el 1 de diciembre que el 75 % de los nuevos casos de ébola estuvieran bajo tratamiento en unidades especiales, y que el 75 % de los entierros se hicieran en condiciones seguras.
Los últimos datos, agregó, indican que se está consiguiendo aislar al 55 % de los nuevos infectados y el 87 % de los entierros se están realizando en condiciones adecuadas.
«Se ha hecho un tremendo progreso, pero aún hay tremendos desafíos», agregó.