El líder de la corriente perredista Nueva Izquierda (NI), Jesús Ortega, cuyo grupo apoyó al ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, acusado de homicidio y delincuencia organizada, y al que se le responsabiliza de la desaparición de 43 normalistas de Ayotiznapa, vio innecesario abrir una investigación dentro del PRD sobre cómo fue posible la llegada del ex edil a sus listas de candidatos, o la supuesta protección que habría recibido desde la dirigencia, pese a las denuncias previas en su contra; todo está en manos de la autoridad judicial, dijo.
El PRD no es Ministerio Público, no puede juzgar o prejuzgar sobre la conducta de sus cuatro millones de afiliados, y atender las quejas que recibe ese y otros partidos sobre sus funcionarios haría de ellos “espacio insoportable para la convivencia “, indicó.
El ex líder del PRD hasta 2008 sostuvo: “No digo a diario, pero frecuentemente me llegaban señalamientos de compañeros sobre otros compañeros. ¿Cómo puede uno, como dirigente del partido, prejuzgar o juzgar sobre la base de un señalamiento de otro compañero de partido? Se convertirían todos los partidos políticos en un espacio insoportable para la convivencia”.
En entrevista, se refirió a los señalamientos que ha recibido su corriente, conocida como Los Chuchos, y a la que pertenecieron los ahora detenidos Abarca y su esposa María de los Angeles Pineda Villa, presuntos responsables de la represión y desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Insistió en que su partido vive una situación difícil, “sería una necedad negarlo”, pero lo que corresponde es hacer control de daños y trabajar para evitar que un caso así se repita. Controles en selección de candidatos, reformas para impedir el registro a aspirantes con antecedentes y vigilancia social sobre los perfiles, son algunos de los ejes en los que ya se trabaja.
Confía en que al final “se concluirá que el PRD no tiene responsabilidad de actos ilícitos y si un perredista la tiene, pues tendrá que pagar por haberlos cometidos”, insistió el líder de la principal corriente del PRD y a la que pertenece el presidente, Carlos Navarrete.
Pero, advirtió Ortega, la crisis la vive no sólo el PRD y ni siquiera sólo los partidos políticos, pues la delincuencia organizada ha penetrado “al Estado en su conjunto, empresas, bancos, iglesias… Iguala es una tragedia pero es parte de la gran tragedia nacional“, por lo que también toca a todos enfrentarlo.
Guerra en el PRD. Ortega recordó que quienes registraron a Abarca como candidato fueron PRD, PT y Movimiento Ciudadano “de lo que poco se habla porque fue una coalición”, y a propuesta de Lázaro Mazón, hoy precandidato de Andrés Manuel López Obrador al gobierno de Guerrero.
“Todo ello hace que en el asunto de la postulación de Abarca seamos muchos los que fuimos sorprendidos, porque el partido actúa siempre de buena fe, nosotros no podemos prejuzgar”, expuso.
Pero es una “tontería” y es “ingenuo” responsabilizarse mutuamente sobre el impulso dado a Abarca pues sólo contribuyen con “quienes evidentemente están lanzando una campaña en contra del partido”, advirtió en referencia a las acusaciones que cruzaron la semana pasada el coordinador de los senadores del PRD, Miguel Barbosa, y el líder de la corriente Patria Digna, Carlos Sotelo.
¿Qué le podría hacer más daño al PRD, lo de Iguala o el ‘canibalismo’ interno?
—La situación que se registró en Iguala se va a esclarecer y se va a evidenciar que como institución el PRD no tiene responsabilidad penal alguna, ni responsabilidad administrativa o de otra naturaleza. Se va a evidenciar, estoy completamente seguro. Si hay un militante o ciudadano postulado por el partido y que cometió un ilícito, este ciudadano en particular es el responsable.
¿Internamente sería viable una investigación? Dice René Bejarano (líder de Izquierda Democrática Nacional, IDN) que así como advirtió a la PGR que Abarca había asesinado a perredistas, lo informó al PRD y no hicieron nada.
—No sé, no lo creo con sinceridad y menos pensar que el asunto es resultado de diferencias internas dentro del partido (…) quien piense de esta manera está cometiendo un grave error de carácter estratégico porque finalmente no daña a su contrincante al interior, sino daña al conjunto del partido.
Lo que se deben investigar son los ilícitos y eso toca a la autoridad.
¿Si les llega una denuncia de que tal funcionario tiene nexos? ¿Van a decir: ‘como no es asunto penal no nos toca’?
—No, el PRD debe notificar a las autoridades correspondientes.
¿Debió notificar (Jesús) Zambrano (ex líder nacional)?
—Como sucedió. Porque Zambrano ya ha explicado que varias veces planteó ante la autoridad correspondiente cuando fue presidente, pero además Bejarano también lo hizo… ¿Por qué no investigó la PGR?
Dice Bejarano que los dirigentes no hicieron nada, que NI encubrió…
—No voy a entrar (a eso)…
¿No tocaba hacer algo al PRD?
—Ya estaba puesta la denuncia, el mismo René informó y si la puso, la PGR debió haberlo investigado para que no sucediera lo que sucedió.
¿Toca a autoridades poner lupa a los gobiernos y detectar irregularidades porque los partidos no pueden hacer nada?
—No; los partidos tenemos responsabilidad política pero no podemos convertirnos en Ministerio Público.