El gobierno de Israel autorizó hoy la construcción de más de mil viviendas para colonos judíos en Jerusalén Este, en medio de la creciente tensión, luego de que un palestino atropelló deliberadamente a nueve civiles israelíes.
«El gobierno ha decidido avanzar en la planificación de mil 60 unidades en Jerusalén oriental», informó este lunes un portavoz de la oficina del primer ministro, Benjamin Netanyahu, quien defendió el derecho de Israel a construir en los asentamientos judíos.
De las mil 60 unidades de casas nuevas autorizadas este lunes, 660 se construirán en el distrito de Ramat Shlomo y 400 más en Har Homa, en el este de Jerusalén, la zona ocupada por Israel durante la llamada Guerra de los Seis Días de 1967.
A la vez, las autoridades israelíes aprobaron un plan de infraestructuras, carreteras en su mayoría, para los asentamientos de Cisjordania, en donde se calcula que viven más de 300 mil colonos judíos, destacó la fuentes oficial israelí.
Por estas vías podrán circular también los palestinos, por lo que la propuesta representa una «mejora» en la calidad de vida de todos los habitantes de la zona, destacó el portavoz del gobierno israelí sin dar detalles de cuándo comenzará la construcción.
El vocero también se negó a comentar sobre el impacto político y diplomático probable que ocasionará la construcción de las nuevas viviendas, principalmente para las estancadas negociaciones de paz entre palestinos e israelíes.
A principios de este mes, Israel anunció la construcción de dos mil 500 nuevas casas en Givat Hamatos, un colonia de reciente creación al sur de Jerusalén, lo que generó duras críticas de Estados Unidos por considerar que afectan las negociaciones de paz.
Sin embargo, el propio Netanyahu afirmó este lunes en la apertura de las sesiones de invierno de la Knesset (Parlamento) que Israel tiene todo el derecho a construir en Jerusalén este, según reporte del sitio Ynetnews.
«Israel tiene todo el derecho a construir en los barrios judíos de Jerusalén», afirmó, tras descartar que el incremento de la violencia de los palestinos contra los israelíes sea el resultado de la construcción en Jerusalén oriental.
El primer ministro de Israel reiteró que el terrorismo no proviene de la construcción de Jerusalén oriental sino que proviene de la voluntad de nuestros enemigos que no estemos allí.
«Los palestinos exigen el establecimiento de un Estado palestino sin paz ni seguridad. Exigen la retirada, el derecho de retorno y una división de Jerusalén. Se niegan a aceptar la condición elemental para la paz entre dos naciones – reconocimiento mutuo», dijo Netanyahu.
El jefe de gobierno israelí declaró además que los palestinos deben tener un deseo de paz y lamentablemente, agregó, «no veo que haya ese deseo».