El melón es el fruto de una planta trepadora (melonera) de la familia de las Cucurbitáceas (Cucumis melo). El tallo está cubierto de pelos y también las hojas por el envés. Éstas tienen un aspecto palmeado, con los márgenes dentados.
Las flores son amarillas y pueden ser masculinas y femeninas. El fruto es esférico o aovado, de gran tamaño, de corteza dura, verde, amarilla, anaranjada o blanca, de superficie lisa o estriada. La pulpa es blanca o anaranjada y contiene en su centro numerosas semillas (pepitas) envueltas en una matriz gelatinosa. Existen diversas variedades de forma, color y gusto diferentes.
¿Cuál es su origen?
Su origen es impreciso pero parece que es oriundo de Asia Central o África. Existen representaciones del melón en tumbas egipcias, 2.400 años a.C.
Apolo. Foto: Wikimedia
Fue muy apreciado por los griegos que lo consideraban una obra maestra de Apolo. También fue cultivado por los romanos que lo extendieron por toda el área mediterránea.
Una antigua creencia árabe decía que «el que sacie su estómago con melones se llenará de luz».
A mediados de siglo XV fue muy consumido en Francia acompañado de moscatel. Los navegantes españoles lo llevaron a América, en donde se extendió su cultivo por todas las zonas cálidas, con pocas lluvias.
Los principales productores son actualmente China, Turquía, Estados Unidos, Irán y España.
¿Por qué se llama melón?
Probablemente el nombre viene del latín: melon. Se conoce como:
Inglés, francés y gallego: melon.
Catalán: meló.
Portugués: melao
Alemán e italiano: melone.
¿Para qué se usa el melón?
El melón se usa básicamente en alimentación por sus importantes cualidades nutricionales, ya que contiene abundantes vitaminas (A, C y K) y antioxidantes.
Melón cantalupo
Se usa como fruta, cortado de diferentes formas, en rodajas, en bolas, en triángulos, etc…También en macedonias y ensaladas y en helados y granizados.
En Francia se usa como entrante un tipo de melón anaranjado y poco dulce (Cantalupo), vaciando su interior y llenándolo de bolitas de melón y vino.
También se usa como entrante en rodajas, acompañado de jamón, ya que suaviza la textura del jamón y contrarresta la sal.
El componente principal del melón es el agua, que se encuentra en un 80%. Debido a esto, esta fruta contiene un escaso poder calórico. El nutriente principal es el azúcar, aportando 10% de las calorías totales, es pobre en proteínas y grasas.
Los minerales que aporta en mayor cantidad son el potasio y el magnesio, y son una de las frutas frescas más ricas en sodio (10 miligramos/100 gramos de producto, frente a los 4 miligramos/ 100 gramos de media del resto de frutas).
El melón es rico en vitamina C y beta-carotenos, ambos con acción antioxidante, aunque la cantidad de caroteno va a depender de la intensidad del pigmento anaranjado de la pulpa. El beta-caroteno se transforma en vitamina A en nuestro organismo conforme éste lo necesita.
El melón en la cocina
Aunque en la actualidad podemos encontrar melón durante todo el año en el mercado, su temporada llega con el calor, que es cuando más jugoso y gustoso está. Esta fruta puede combinarse con dulces y salados.
El melón en la cultura popular
Esta fruta forma parte de la cultura popular en muchas partes del mundo, sobretodo en aquellas con clima templado, donde se cultiva.