Un panteón, entre las propiedades del patrimonio del SNTE

El camino de tierra, que hoy es lodo, abre paso a una rotonda blanca rodeada por una malla oxidada. Se trata del Panteón Magisterial propiedad del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), y como ese memorial, la organización ha acumulado en siete décadas velatorios, hospitales, clínicas de especialidades, centros de cirugía plástica, hoteles en ciudades o centros turísticos, centrales de abasto, granjas, balnearios, cabañas, teatros, unidades deportivas o habitacionales, que suman al menos 651 inmuebles distribuidos en todo el país.

El patrimonio del SNTE, producto de las demandas planteadas en las negociaciones salariales de cada año, resulta incierto pues estas propiedades corresponden a 46 secciones sindicales —de las 57 existentes—.

Significa que el SNTE, con las gestiones de su dirigencia, obtuvo en promedio anual nueve inmuebles o propiedades de manera constante a lo largo de 70 años de la organización del magisterio.

Como parte del programa de actualización y mejoramiento del patrimonio inmobiliario, el sindicato magisterial realizó hasta el 15 de julio de este año un “inventario, registro, clasificación y catalogación” de sus inmuebles, y reporta la existencia de 33 tipos distintos de bienes.

En este ejercicio de transparencia, el sindicato que preside Juan Díaz de la Torre omite hacer pública la información de sus bienes en el caso de 12 secciones y no difunde los que tiene el Comité Ejecutivo Nacional.

Patrimonio del gremio

Tan sólo el valor de los bienes inmuebles e intangibles que posee la dirigencia nacional tienen un valor cercano a 19.3 millones de pesos, según el reporte financiero del sindicato.

Por secciones, es la 15 del estado de Hidalgo la que —según el documento consultado por un Diario de circulación nacional— acumula el mayor número al cuantificar 67 propiedades, aunque en la revisión de cada una de ellas se observó que se duplican.

Le sigue la sección 2 de Baja California y la 50 de Nuevo León con 41 inmuebles; y con 32 propiedades cada una están las secciones 56 de Veracruz, la 5 de Coahuila, la 8 de Chihuahua y la 29 de Tabasco.

Entre las propiedades que la organización ha acumulado están el Panteón Magisterial, ubicado en el kilómetro 14 de la carretera Pachuca-Ciudad Sahagún, a la altura del fraccionamiento Xochihuacan, en Epazoyucan, municipio vecino de Pachuca.

A 15 minutos de la capital de Hidalgo está el memorial de la sección 15 del magisterio, construido en mayo de 2007, según la placa del SNTE en la que se lee “el misterio más grande del universo es el paso más difícil de la vida… La muerte”. Es un lugar con capacidad para 6 mil tumbas y 3 mil nichos, que al principio fue proyectado para estar equipado con un crematorio ecológico, con oficinas administrativas, una bodega y una capilla.

A poco menos de tres años de que la entonces lideresa de la sección Mirna García —quien está encarcelada y enfrenta un proceso por peculado durante su gestión en el sindicato— encabezara la ceremonia de apertura, el lugar está descuidado. Y se llega a él por un camino de tierra que por las lluvias está hecho lodo.

La brecha lleva directamente a la puerta principal. Dos rejas negras cerradas con un candado muestran un memorial solo, no se ven las tumbas por el pasto crecido junto con hierba del campo.

Desde la administración del ex presidente Vicente Fox, a través de sus dirigentes, Elba Esther Gordillo —encarcelada desde febrero de 2013, acusada de uso de las cuotas sindicales, lavado de dinero, delincuencia organizada y defraudación fiscal—, y ahora Juan Díaz de la Torre, el SNTE presume ser la organización de trabajadores “consentida” por el gobierno federal.

El sindicato se ha visto beneficiado no sólo con el monto de incrementos salariales alcanzados, sino también por el tipo de prestaciones concertadas con los gobiernos federal o estatales, “por encima de la mayoría de revisiones salariales que se han realizado en otros sectores”, se replicó año con año entre los agremiados a través de diversos documentos informativos.

El catálogo

Ahora el informe de catalogación de propiedades refiere, por ejemplo, que para mejorar la atención de los trabajadores en los servicios de seguridad social la dirigencia de Nuevo León logró la instalación de dos hospitales, el primero de ellos lleva el nombre del ex dirigente nacional Carlos Jonguitud Barrios.

Sin embargo, al consultar en la sección 50, lo que se informa es que existe una clínica hospital; además de 15 módulos de consulta externa distribuidos por el estado de Nuevo León, así como tres centros regionales de especialidades médicas.

Entre la veintena de especialidades que se atienden están la cirugía oncológica, pediátrica, cardiovascular, plástica, neurología y la atención sicológica y pediátrica, entre otras.

Del total de bienes conseguidos por las dirigencias de cada sección se tiene que 262 edificios o instalaciones corresponden a sedes de las dirigencias estatales en las capitales o distribuidas regionalmente.

Entre predios, terrenos y lotes, las secciones sindicales han arrancado a los gobiernos estatales 178 propiedades que están pendientes de desarrollo o en proceso de construcción.

Para el esparcimiento de los más de un millón 700 mil maestros y trabajadores afiliados en el país, la organización cuenta con 28 centros recreativos, balnearios y cabañas como el Centro Vacacional “El Vergel”, o la Posada Vacacional, en Nuevo León; así como el Centro Vacacional ubicado en la congregación de Paso Doña Juana, en el municipio de Úrsulo Galván, que corresponde a una de las dos secciones magisteriales de Veracruz.

En centros turísticos como Acapulco, pero también en las ciudades, el SNTE cuenta con 11 hoteles con cuotas accesibles que pueden ser cobrables a través de la nómina.

A ello se agregan cuatro fincas de descanso y las 56 casas del magisterio que funcionan en su mayoría como centros para la atención de los trabajadores jubilados.

Los auditorios y los salones de uso múltiple suman 14 inmuebles; además de un teatro, con sede en La Paz, Baja California Sur; siete unidades deportivas, cinco gimnasios y cuatro centros culturales.

Fuera de la lista han quedado sólo las que la dirigencia nacional tiene en el Distrito Federal, donde el gremio cuenta con al menos cuatro inmuebles de su propiedad o que están en comodato bajo su resguardo: el Portal del Sol, un centro con salones, áreas verdes y privados, ubicado en Santa Fe.

También está el ex convento de Santo Domingo, que por años fue administrado por Maricruz Montelongo, hija de Elba Esther Gordillo.

Tampoco se incluye el edificio de las oficinas centrales ni de la Casa del Magisterio, que funciona como casa de huéspedes para los trabajadores de la educación que acuden a hacer trámites a la ciudad de México.

Incluso dentro del inventario realizado se excluye que el SNTE es el propietario de El Paraíso, que es un centro vacacional de exclusividad para la dirigencia nacional, “amigos influyentes y políticos”, ubicado en Arteaga, Coahuila, y es un inmueble de la sección 21 de Nuevo León.

Se trata de un doble complejo de 8 cabañas, insertas en un cañón de reserva ecológica de pinos, que cuenta con alberca techada, climatizada y disponible durante todo el año, como lo reveló un Diario de circulación hace cinco años (20 de mayo de 2009).

El catálogo de bienes deja de lado, lo mismo, las propiedades obtenidas por las secciones disidentes, integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Tan sólo a la sección 22 de Oaxaca pertenecían 17 bienes entre hoteles, terrenos, edificios, auditorios, cafeterías, centros culturales y la Casa del Maestro Oaxaqueño (Camao) en la ciudad de México.

Como lo dio a conocer este diario, se trata de la que por años fue la representación del gobierno de Oaxaca en la capital del país, entregada en una negociación con el gobernador de ese estado, José Murat, con la dirigencia, en el año 2003.