«No habrá privilegios a inversión en energía»: Coldwell

Los plazos de implementación de la reforma energética se han realizado “con la celeridad que se requiere” y México está haciendo sus licitaciones en casi la mitad del tiempo que la llevaron a cabo economías similares, aseguró el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.

“Hubo países que se tardaron varios años en hacer su Ronda Uno. Aquí prácticamente con la Ronda Cero empezamos la Ronda Uno; pensamos ejecutarla en un año, 13 meses para ser más preciso”, comentó el funcionario en entrevista con  un Diario de circulación nacional.

Sobre el tema, subrayó que este calendario de plazos le permite tener una meta “ambiciosa” de producción: 500 mil barriles más hacia 2018.

“Si partimos de la producción que tuvimos de enero a junio de este año, que son 2 millones 340 mil barriles, pudiéramos estar hacia fines de 2018 en 2 millones 840 mil” y agregó que se tiene la meta de poder llegar hacia mediados del siguiente sexenio a 3.5 millones de barriles diarios.

El secretario de Energía confirmó que existen muchos grupos empresariales mexicanos que buscan socios extranjeros con los que puedan sumar capital y recibir tecnología para dedicarse a la exploración y explotación de hidrocarburos.

Anunció que habrá presentaciones de la Ronda Uno mexicana en ciudades como Houston, Nueva York, Londres y probablemente Oslo, pues el titular de la Sener está convencido de que “mientras más participantes tengamos, mejores opciones tendremos para elegir y contribuiremos a incrementar la renta petrolera de México”.

Explicó que la coyuntura actual de tensiones en diversas regiones petroleras y gasíferas del mundo puede ser favorable a México, pues el hecho de ser un país que tiene reglas muy claras de su reforma energética y recursos importantes que se pueden aprovechar, “nos hacer ser atractivos”.

México experimenta una caída de la producción de petróleo y gas, ¿esto obliga a apresurar el paso de la reforma energética?

—Los plazos de implementación de esta reforma los hemos hecho con la celeridad que se requiere. De hecho, México está haciendo sus licitaciones en plazos más cortos de lo que lo hicieron otros países similares, en casi la mitad del tiempo.

Hubo países que se tardaron varios años en hacer su Ronda Uno. Aquí prácticamente con la Ronda Cero iniciamos la Ronda Uno, y pensamos ejecutarla en un año, 13 meses para ser más preciso.

¿Considera que haber acortado los tiempos, ayuda en el corto y mediano plazos a mejorar la producción?

—Para incrementar la producción en el corto plazo están los campos maduros, es lo más rápido que nos puede ayudar a estabilizar la producción. En el mediano plazo tenemos aguas someras y yacimientos no convencionales y en el largo plazo, las aguas profundas.

Este portafolio de plazos ¿permite ajustar una meta en producción?

—Sí, tenemos una meta ambiciosa que es 500 mil barriles más hacia 2018.

Hoy se tiene un promedio de 2 millones 415 mil barriles, ¿alcanzará para 3 millones?

—Estaremos bajos. Si partimos de la producción que tuvimos de enero a junio de este año, que son 2 millones 340 mil, pudiéramos estar hacia fines de 2018 en 2 millones 840 mil barriles.

¿Esto permite controlar el déficit y obtener una tendencia a la alza?

—Esto implicaría ya un alza en la producción y caminar hacia el objetivo de ir incrementando gradualmente la producción, poder llegar hacia mediados del siguiente sexenio a 3.5 millones de barriles diarios.

Pese a los acontecimientos bélicos de Medio Oriente, los precios del petróleo se mantienen a la baja en lugar de incrementar. ¿Este nuevo acontecimiento geopolítico afecta a México?

—Seguramente los precios del petróleo no se han desplomado como sucedía en otros tiempos, por el crecimiento de la producción de los Estados Unidos. Esta es la primera señal de cómo va a influir el hecho de que Estados Unidos se convierta en un país autosuficiente en hidrocarburos y eventualmente en exportador en los mercados.

Por otra parte, el timing mexicano de la Ronda Uno, de ser un país que ofrece un portafolio diversificado en momento de tensiones en diversas regiones petroleras y gasíferas del mundo, nos hace ser atractivos, un país que tiene reglas muy claras de su reforma energética y recursos importantes que se pueden aprovechar.

¿Es recomendable que Pemex necesite la aprobación de la Sener y la CNH para asociarse con otras empresas?

—Por razones de transparencia, el gobierno y legisladores determinamos que fuera la Comisión Nacional de Hidrocarburos la que lo otorgara, oyendo la opinión de Pemex porque esto no es vinculatorio. Se pretendió privilegiar la transparencia.

En el World National Oil Company Congress funcionarios de la Sener dieron a conocer que hay acercamientos importantes con un número de empresas petroleras de alto nivel. ¿Cuál fue el resultado, existe interés concreto y de quién?

—Hay muchos grupos empresariales mexicanos que están buscando socios extranjeros con los que puedan sumar capital, recibir tecnología, dedicarse a la exploración y a la explotación de hidrocarburos.

En el caso de empresas internacionales que no vayan con algún consorcio mexicano, ¿también hubo acercamiento?

—Sí, con todas las empresas que estaban ahí de corte estatal. Estaba la empresa japonesa, coreana, había gente de Brasil, empresas australianas y desde luego participaron empresas no nacionales. A partir de ahora habrá presentaciones sucesivas en algunas capitales internacionales de la actividad de hidrocarburos, como Houston, Nueva York, Londres, probablemente Oslo, para presentar la Ronda Uno mexicana. Mientras más participantes tengamos, mejores opciones tendremos para elegir y contribuiremos a incrementar la renta petrolera de México.

¿Alcanzó Pemex acuerdos de colaboración?

—Sí, firmó acuerdos de cooperación con distintas empresas.

Durante el citado congreso muchas de estas empresas, tanto nacionales como internacionales, sobre todo internacionales, hablaron de ayudar a México a darle una mayor velocidad a la reforma, ¿cómo es este proceso, cómo le pueden ayudar ellos a dar celeridad?

—Fundamentalmente aportándonos sus puntos de vista respecto a las características de la Ronda Uno. Me parece que esta etapa de retroalimentación nos va a permitir identificar si los tamaños de los bloques son los adecuados, si nuestros portafolios son lo suficientemente diversificados para captar suficiente capital y tecnología, creo que este es el elemento fundamental para que la ronda se lleve a cabo a buen ritmo.

Cambiando de tema, durante su comparecencia ante legisladores como parte de la glosa, usted señaló que esperan inversiones de 50 mil millones de dólares, entre 2015 y 2018. ¿De esas inversiones, cuánto es inversión privada por los cambios constitucionales de la Ronda Uno y cuánto es lo que se le va a presupuestar a Pemex?

Los 50 mil millones de dólares es totalmente inversión privada que esperamos que se dé en el país. Pemex hará, por su parte, inversiones de alrededor de 23 mil y 25 mil millones de dólares anuales aproximadamente, adicionales a estos 50 mil.

Sobre el esquema fiscal de los contratos, ¿cuáles son los principales elementos que se van a aplicar, cómo el tratamiento para las empresas y cómo lo recibieron éstas?

—El régimen fiscal varía según el tipo de contrato. Tratándose de contratos de licencia, habrá el pago de un bono en la firma; en la fase exploratoria se tendrá que pagar una cuota contractual por kilómetro cuadrado del área asignada a la empresa; habrá además una regalía que se fija sobre el valor contractual de los hidrocarburos, y una contraprestación que será una tasa especial sobre el valor contractual de los hidrocarburos.

En el caso de contratos de utilidad y de producción compartida, habrá la cuota por superficie; en el caso de la exploración, se pagará una regalía y una contraprestación que se calculará sobre la utilidad operativa.

Los valores económicos de estos derechos los establecerá la Secretaría de Hacienda en los primeros 15 días del año y regirán para la ronda licitatoria que se lleve a cabo en ese tiempo.

En el caso de México es recurrente que el gobierno dé incentivos para atraer inversiones. ¿Qué incentivos va a haber en este sector?

—No habrá incentivos especiales, no los requerimos. Los incentivos serán reglas claras, parámetros internacionales, un país que tiene estabilidad política, fiscal y económica.

Es decir que no va a haber nada extra, ni concesiones…

—No habrá ninguna prerrogativa de corte fiscal ni económico, y los contratos serán asignados rigurosamente por mandato de ley a la empresa que haga la mejor oferta económica para el Estado mexicano.

Con relación a la seguridad, sigue habiendo un creciente número de tomas clandestinas y un impacto económico para Pemex cercano a los 15 mil millones de pesos al año. ¿El robo de hidrocarburos debe preocupar a los privados?

—El robo de hidrocarburos ha afectado los ingresos del erario nacional de manera considerable en los últimos años, ha sido una actividad delictiva que ha ido creciendo, tanto en el volumen de combustible que se roba como su extensión geográfica; sin embargo, ya las primeras medidas que ha tomado este gobierno empiezan a dar resultados.

Es decir que mano dura y legalidad es lo que va a hacer que haya un ambiente propicio para que los inversionistas no estén preocupados.

Sí, aplicación estricta de la ley y evitar la impunidad. La estrategia de seguridad que está llevando a cabo el gobierno va a permitir ofrecerles condiciones adecuadas para desarrollar su trabajo en un ambiente de tranquilidad.

¿Por lo que respecta a la jurídica?

Por lo que hace a la seguridad de los inversionistas y las empresas que vendrán a establecerse, el Estado mexicano garantizará que las actividades de hidrocarburos se lleven dentro de un margen seguro.

Si otros países, digamos más débiles institucionalmente que México, han podido ofrecer seguridad, no hay razón por la cual nosotros no lo hagamos.

¿Cuál cree usted que serán a corto plazo los tres principales beneficios que va atraer la reforma energética para México?

Empleos. Esperamos poder crear 500 mil empleos, frenar hacia el final del sexenio la declinación petrolera y gasífera que ha venido afectando al país, y capital y tecnología que nos permita acceder a zonas petroleras que ahora no hemos podido explotar.

En esta parte ya de la implementación de la Ronda Uno y cuando empiecen a llegar las inversiones, ¿el gobierno federal ha tomado en cuenta que se pueden crear burbujas en las economías locales? Por ejemplo, puede aumentar la inflación local porque va a haber una mayor entrada de capital o pueden hacer falta hoteles o restaurantes porque son zonas que no tienen mucho desarrollo.

—Seguramente varias regiones petroleras de México van a tener que mejorar su infraestructura urbana, social y de servicios ante la llegada de inversión extranjera, creo que es uno de los retos que vamos afrontar, pero ya estamos viendo que la inversión privada empieza a moverse en el sector servicios.

Me informaban empresarios turísticos de Paraíso, Tabasco, que ya hay 4 hoteles en proceso de construcción, mientras varios gobiernos estatales, como Tamaulipas, Nuevo León, también están elaborando sus agendas energéticas y programas estatales que contextualizan la reforma energética en el plano local, y establecen como van a mejorar; en el caso de Tamaulipas, la infraestructura carretera para llegar a las zonas petroleras o el acondicionamiento del puerto de Matamoros.

¿Va a haber un acompañamiento del gobierno federal para el desarrollo de infraestructura?

Desde luego que sí, a través del Presupuesto de Egresos de la Federación y los convenios que se instrumentarán entre la federación y los estados.

¿Cuándo se empezarán a ver los desarrollos para prepararse a la llegada de la inversión?

Estimamos tener pre bases licitatorias en noviembre. En febrero estaríamos emitiendo las bases licitatorias, los primeros contratos los vamos a estar otorgando entre mayo y septiembre, iremos quizás desde los más fáciles a los más complejos, campos maduros, aguas someras, después yacimientos no convencionales, para alrededor de septiembre estar otorgando contratos en aguas profundas.

Estimamos que hacia 2016 empezaremos a ver la derrama económica derivada de la reforma.

Sobre la inflación que se puede dar en las localidades, ¿está habiendo un acercamiento de la Sener con Hacienda y el Banco de México para apoyar esas zonas?

No, no se ha trabajado aún en esa dirección, me parece que eso debe de estar fundamentalmente en la acción de los gobiernos locales.

¿Con la reforma energética, México debe ser visto como una potencia en este campo o únicamente como uno de manufacturas como es hoy en día?

México con la reforma puede llegar a serlo, y debe de ir desarrollando una industria de proveeduría nacional.

Hacia allá va encaminada la decisión de los legisladores mexicanos, de incluir en la reforma porcentajes mínimos de contenido nacional, y la implementación de política pública de crear el fondo para los proveedores nacionales, para capacitarlos y que dispongan de suficientes créditos para poder beneficiarse.