No sacrificarán a perro de enfermera con ébola en EU

El perro de Nina Pham, enfermera de Texas que fue diagnosticada la semana pasada con ébola, no será sacrificado como ocurrió con «Excalibur», la mascota de la trabajadora de salud que contrajo el virus en España.

El alcalde de Dallas, Mike Rawlings dijo hoy al portal USA Today que el perro se quedó en el apartamento de Pham, cuando ésta fue hospitalizada y pronto será enviado a una nueva ubicación mientras su dueña se recupera.

Señaló que no hay ningún plan para poner a dormir al can. «Este fue un nuevo giro. Este perro es una parte importante de la familia de nuestra trabajadora de la salud. Queremos asegurarnos de que esté en un lugar seguro», aseguró Rawlings al portal.

Autoridades sanitarias se encargarán de transportar y cuidar del animal con el debido equipo de protección, mientras se determina si puede representar o no un peligro para la salud.

La semana pasada, en España hubo una corta pero intensa batalla entre autoridades de salud y activistas por la vida de «Excalibur», un perro marrón claro de raza mixta que pertenecía a la ayudante de enfermería española, Teresa Romero, quien contrajo el virus mientras cuidaba a un misionero que murió el mes pasado por la enfermedad.

El can, que estaba solo en el departamento desde el lunes, fue finalmente sacado del bloque de apartamentos en una camioneta policial con su conductor usando un traje de protección, para luego ser sacrificado.

La decisión de las autoridades españolas de matarlo «para evitar un posible contagio» lo convirtió en una especie de mártir en el país, y desató una gran oleada de reacciones que llevó el mensaje #SalvemosaExcalibur a la máxima posición mundial de la red social Twitter.

Todo comenzó cuando el esposo de la enfermera infectada difundió un video en el que pedía ayuda para salvar a su perro. Sus palabras circularon rápidamente por las redes sociales y los defensores de los animales reclamaron que se pusiera a la mascota en cuarentena, medida que se tomó con las personas que tuvieron contacto con la infectada.

El debate se trasladó al ámbito científico. Y mientras algunos expertos abogaron por no correr riesgos ante un posible contagio, otros se mostraron contrarios al sacrificio, por considerar que el perro es una pieza clave en la investigación sobre el ébola.

Hasta ahora no hay estudios que demuestren la transmisión del ébola de un ser humano a un perro, pero algunos sugieren que estos animales pueden ser infectados por el virus sin que muestren síntomas.