Hallan en Coahuila cementerio de dinosaurios

En el desierto coahuilense de la cuenca de Parras, un equipo de paleontólogos de México y Alemania descubrieron un cementerio de di-nosaurios en el cual había la primera evidencia para el mundo de un reptil marino del tipo «Elasmosaurio» que incursionó en agua dulce, lo que nuevamente ubica a Coahuila en los primeros lugares a nivel mundial en riqueza fósil y en trabajos de investigación en esta materia.
Hallaron también, en un terrenos de un kilómetro cuadrado, aproximadamente, 16 esqueletos de Adrosaurio o Dinosaurio «Pico de Pato», además de huesos y fragmentos de dinosau-rios, hadrosaurios, dietes de tiranosaurios, restos de cocodrilos, peces, tres tipos de tortugas y más, durante la expedición que efectuó un grupo de 10 investigadores que duró 10 días, en lo que consideran una excelente temporada de trabajo de campo.
«Con este hallazgo México se ubica entre los primeros 10 lugares a nivel mundial en riqueza de Dinosaurios, junto con China y Mongolia», aseguró el Jefe del Departamento de Paleontología del Museo del Desierto (MUDE), doctor en Paleontología, Héctor Rivera-Sylva. Adicionalmente efectuaron una excavación para rescatar un 60 % de huesos fósiles de un hadrosaurio de 5 a 6 metros de largo, de un solo ejemplar; así como dientes y fragmentos aislados de huesos, evidencia que en su conjunto pertenece a esta misma familia Hadrosauridae.
Como parte de los hallazgos localizaron fragmentos de cráneo de un dinosaurio hadro-saurio aún no identificado. «en el laboratorio esperamos determinar el género de dinosaurio al que corresponden estos restos», dijo. Quienes efectuaron el hallazgo junto a otras evidencias fósiles son paleontólogos del Museo del Desierto (MUDE), del Museo de Historia Natural de Karlsruhe y de la Universidad de Heidelberg, Alemania. El grupo interdisciplinario de diez personas, encabezado por los paleontólogos Héctor Rivera a nombre de México, así como Wolfgang Stinnesbeck y Eber-hard Frey en representación de Alemania, entraron al desierto de la Cuenca de Parras el 15 de septiembre para trabajar a cielo abierto durante diez días en búsqueda de evidencias fósiles.
ELASMOSAURIO
Los restos fósiles (falanges) del Elasmosaurio vivió hace más de 72 millones de años, tradicionalmente ubicado en sedimentos marinos, fueron encontrados en un cementerio junto con cocodrilos, tortugas, y coprolitos en otro hábitat al que tradicionalmente frecuentaba, destacó.
«Este ejemplar, —señaló— era un juvenil que estaba viviendo en agua dulce, y posiblemente las crías de elasmosaurios entraban en cuerpos de agua dulce para evitar la depredación que sufrían de especies mayores. Por lo que suponemos que se resguardaban en agua dulce hasta alcanzar un tamaño adecuado que les permitiera volver al agua salada».
Posiblemente, comentó, el Elasmosaurio juvenil incursionó en agua dulce buscando alimento, observando un comportamiento similar al de algunos tiburones actuales, los cuales se sabe, entran a agua dulce y pueden sobrevivir en este ecosis-tema. «Antes de iniciar esta temporada de campo ya teníamos localizados varios puntos con fósiles de hadrosaurios y lo que se acordó fue proceder al rescate en uno de esos puntos», refirió.
Fue así como recolectamos restos de estos ejemplares que se encontraban en la superficie, se levantó el registro geológico del lugar y se encontraron sitios con fósiles más pequeños llamados microfósiles, lo que aumentó considerablemente la riqueza fosilífera estimada en el sitio. Los dientes de tirano-saurios reconfirma la presencia de esta familia en Coahuila, además: «los dientes de tiranosa-urio se pueden identificar por su forma característica y a la presencia de unos dentículos, semejante a una sierra de cuchillo».