«Colchoneros» vencieron por la mínima a la «Juve»

Sin la oportunidad de ver el debut de Raúl Jiménez en Champions League, el Atlético de Madrid venció por la mínima diferencia a la Juventus en un partido que fue todo de lucha, de pelea y de garra y en donde las tarjetas amarillas estuvieron a la orden del día para intentar controlar un encuentro que por momentos estaba lejos de la calidad de las estrellas que estuvieron en el campo de juego.
La calidad quedó para mejor ocasión. Atlético y Juventus optaron por disputar un juego de ajedrez en el que la lucha, la garra y la imprecisión fueron las mejores estrategias que pudieron exponer en lo que ya era esperado como un duelo en el que lo ríspido sería constante y las faltas más recurridas que el buen trato del balón.
Simeone optó por poner un equipo de confianza aunque con más precauciones que las que normalmente adopta, en gran parte por le lesión de Gabi, pero también por el potencial ofensivo de la Vecchia Signora con Tévez, Vidal y Llorente.
Las tímidas llegadas fueron en gran parte de los rojiblancos. Mario Madzukic se despojó temprano de la máscara que protegía su reciente recuperada nariz como intentando que su equipo se quitará la sombra y de esa forma hallar la llave del buen orden que Allegri había implementado en el Calderón.
Fue el propio delantero croata el que tuvo la más cercana cuando le robaron la pelota a Vidal, tomó el esférico y metió un tiro de fuera del área que obligó a una estirada de Buffon.
Juventus respondió de igual forma, pero hasta el segundo tiempo cuando ya el agobio del Madrid se notaba más por el lugar que ocupaba en el terreno de juego que por opciones claras de gol, aunque la paciencia del equipo del “Cholo” parece irrompible.
Fue al 75’ cuando Juanfran se decidió a hacer algo diferente, subió hasta más allá de tres cuartos de cancha y metió un centro engañoso que parecía ser de Mandzukic, pero que llegó perfecto para la aparición de Arda Turan, quien le ganó la espalda a Lichtsteiner para empujar ante la mirada atónita de Buffon que no había recibido gol en esta temporada.
Entonces Allegri se atrevió a mover a sus piezas, sacó a un defensa, retiro a Vidal y puso a Morata para prácticamente poblar toda su línea ofensiva, aunque la oportunidad del empate llegó gracias a un mal rechace de Raúl García que envió a tiro de esquina, pero con la pelota rozando el poste de su propia meta.
Todo queda parejo en el sector A pues Juventus, el Atlético, el Olympiacos y el Malmö se quedarán en tres unidades por lo que después de dos jornadas todo se mantiene igual en uno de los grupos más complicados de la actual edición de la UCL.