Ayón consigue la Supercopa de España

Gustavo Ayón ganó ayer su primer título con el Real Madrid, que por tercera vez consecutiva se impuso al Barcelona, vencedor de la Liga Endesa en la temporada pasada, en la final de la Supercopa de baloncesto celebrada en Vitoria (norte de España).

Y lo hizo por una amplia victoria: 99 a 78 en un partido en el que al mexicano se le vio muy agresivo en defensa. El nayarita recibió tres faltas en tres minutos y se mostró mucho más suelto y confiado en ataque. Su equipo tomó la delantera desde el primer momento con un juego ordenado y claro. Su compañero Sergio Llull fue elegido mejor jugador con 21 puntos y cinco canastas de cinco intentos en triples.

Salvo en el primer minuto en el que se adelantó el Barcelona por 0-3, durante todo el resto del partido dominó el Madrid. En esta ocasión el técnico Pablo Laso sí sacó a Ayón en el cinco titular y de ala-pívot, acompañado por Rudy Fernández, Carroll y Mejri. Y Fernández fue el encargado de meter la primera canasta: un espectacular triple desde una distancia de 7 metros.

Sin embargo, Tomic anotó dos canastas del Barcelona que puso al club blaugrana por delante por primera vez y a partir de ahí se acabó el partido. El Real Madrid con un juego ordenado y muy efectivo en ataque comenzó a dominar y no paró hasta el final.

Gracias también a una defensa con un Ayón más suelto en ataque y muy agresivo en defensa, se adelantaba en el marcador. Primero 8-4. Y gracias a un festival de triples de Llull el equipo se colocaba 19-8. Xavi Pascual solicitaba un tiempo muerto para parar la racha anotadora de los blancos. Y ya sin Ayón en la cancha se llegaba al final del primer cuarto: 29-14 a favor del Madrid.

En el segundo cuarto el Barcelona parecía que reaccionaba. Varios triples de Thomas rebajaban la distancia lo que unido a numerosos errores del Madrid colocaban al equipo catalán a cinco puntos: 38-33. Entonces Laso sacaba a Ayón, quien además de parar a Tobic, hasta ese momento máximo anotador del Barcelona, lograba anotar varias canastas una de ellas un mate. Y al argentino Carpazzo, que además de dirigir muy bien el juego, también lograba anotar un triple, lo que aumentaba la ventaja del Madrid de nuevo 47-36.

Y de ahí hasta el final poco que contar. Con los aciertos de Sergio Llull, que logró 21 puntos y 5 asistencias y se convirtió en el mejor del equipo blanco, ayudado por Rudy Fernández, que anotó 15 puntos; por Bourousis, que marcó 17; y por Rivers, que fue decisivo en el último cuarto, el Madrid se proclamó campeón.

Mientras el Barcelona, pese a los numerosos cambios realizados por su entrenador y desesperado ante la capacidad anotadora de su equipo, tiraba la toalla. Y es que los integrantes del Real Madrid, además de jugar concentrados y a un ritmo imparable, tuvieron un 67 por ciento de aciertos en tiros de dos frente a un 47 por ciento del Barcelona, y  un 59 por ciento en triples frente al 25 por ciento de los catalanes.