Ayón debuta con triunfo en el Real Madrid

El mexicano Gustavo Ayón debutó ayer en la Liga ACB de baloncesto con una victoria del Real Madrid por 89 a 76 frente al Valencia Basket, en la semifinal de la Supercopa. Y aunque sólo logró anotar dos puntos, tuvo cuatro rebotes y demostró garra sobre el terreno de juego. Su equipo se medirá hoy en la final al Barcelona, que venció al Baskonia.

Tal y como había anunciado la prensa española, el técnico blanco Pablo Laso decidió convocar a Ayón y dejar fuera al estadounidense Slaughter, al tener exceso de extracomunitarios (tiene a tres: Campazzo, Ayón y Slaughter). Sin embargo el jugador mexicano no salió de titular ni jugó en todo el primer tiempo. Hubo que esperar al minuto 4 de la segunda parte para que entrara en la cancha y lo hizo con tantas ganas que en apenas tres minutos cometió tres faltas personales —la última de ellas bastante dudosa—, que lo llevaron de nuevo al banquillo. Eso sí, logró un rebote defensivo.

El comienzo estuvo lleno de imprecisiones en el equipo blanco, lo que provocó que en el minuto 5 el Real Madrid perdiera 6-13. Y así seguía en la segunda parte, muy flojo en defensa y desatinado en ataque frente a un Valencia que llevaba las riendas del juego. A falta de cinco minutos del segundo cuarto, el marcador reflejaba 31-36 y los del cuestionado Pablo Laso se recuperaban debido más a fallos del Valencia que a otra cosa y lograban el empate a 43 al final del segundo tiempo.

Tras el intermedio, y sin Ayón en el terreno de juego, el Real Madrid por primera vez lograba ponerse por delante gracias a una mejor defensa y a los aciertos del base Rudy Fernández, que anotaba dos triples consecutivos, y a los de Nocioni. Mientras en el Valencia la defensa empezaba a flojear y Loncar y Lishchuk, sus dos torres, se llenaban de faltas.

Aun así, el tercer cuarto tiempo, con Sergio Llull dirigiendo a los blancos, se convirtió en un estira y afloja en el que ninguno de los dos equipos conseguía imponerse en el marcador. 69-69 y Rudy Fernández metía un triple. 72-69 y era Loncar quien anotaba desde la línea de 6.25. 72-72 y ahora era Sergio Llull el que marcaba otro triple. Y a los pocos segundos le respondía Van Rossom.

El técnico croata Perasovic pedía un tiempo muerto para parar la racha anotadora del Madrid con Llull y Fernández con 18 puntos cada uno. Pero no servía de nada porque Rudy volvía a encestar hasta convertirse con 22  puntos en el máximo anotador. Y eso con un golpe en el estómago que le llevó al banquillo unos minutos, tras chocar con Pau Ribas, y que —como él mismo reconoció al final del encuentro— le impedía respirar.

Ya con Rudy recuperado, el Madrid empezaba a tomar ventaja. Y lo hacía con Ayón también en la duela defendiendo a un imparable Loncar, a quien lograba sacarle una falta personal y anotar uno de los dos tiros libres, acompañado por Macilius, Reyes y Llull. El electrónico marcaba 86-76 y Ayón, con cuatro faltas personales, se iba al banquillo, Llull anotaba un nuevo e impresionante triple (el quinto de cinco) y concluía un partido muy parejo, puesto que se decidió en los últimos cinco minutos y tras un empate a 69.

Hoy se jugará la final con un clásico. Si el Real Madrid se impone será la tercera vez consecutiva que gane esta competición.