Ignacio Yris Salomón, presidente nacional del Partido Humanista, instruyó el desconocimiento de la Asamblea Estatal Constitutiva de ese instituto político de nueva creación en San Luis Potosí. Al mismo tiempo, demandó a las autoridades del Instituto Nacional Electoral y a la Subprocuraduría para Delitos Electorales una profunda investigación de los hechos de violencia registrados el martes 10 de septiembre, que dejara un saldo de tres personas gravemente lastimadas.
Ese día, integrantes del Partido Humanista en San Luis Potosí fueron convocados para realizar la asamblea estatal constitutiva, a fin de designar mediante voto a su mesa directiva. La cita fue programada para las 11:30 de la mañana, en un salón denominado Jacqueline, ubicado en el número 300 de la Calle de Seminario.
Cuando los convocados llegaron encontraron que un grupo de numerosas personas, encabezadas por el abogado Luciano Guardiola, así como por Teresa de Jesús Mendoza, ex directora del Instituto Estatal de la Mujer (IMES), impedían la entrada de los asambleístas.
Se trataba del grupo identificado como Unimos, encabezado por el Contador Público Benito Mata Campu-zano, quien es profesor de la Escuela de Ciencias de la Información de la UASLP y ligado a Teresa de Jesús Mendoza cuando ésta fungió como presidenta estatal del Partido Socialdemócrata y que impulsara la candidatura presidencial de Dora Patricia Mercado.
Benito Mata Campuzano fungió como tesorero del Partido Socialdemócrata, de donde fuera objeto de expulsión por el uso indebido de los recursos asignados a ese partido. La sanción no fue más allá, debido a que contó con la protección y defensa de Teresa de Jesús Mendoza, quien para entonces había sustentado una alianza con el Partido Revolucionario Institucional y el equipo de trabajo del entonces candidato a la gubernatura, Fernando Toranzo Fernández.
Los miembros de Unimos identificaron a los opositores de la propuesta de presidente de Teresa de Jesús Mendoza y de Arturo Badillo, dirigente estatal del CAT, y comenzaron a azuzarlos.
Esto motivó la intervención de la delegada nacional del PHy representante personal de Yris Salomón, Diana Montiel, quien fue agredida verbalmente e invitada de manera grosera a retirarse. Pronto vinieron los empujones, lo que motivó la intervención en defensa de la delegada nacional de la abogada Rosalba Medina y de Ángel Martínez Blanco.
Los integrantes del grupo Unimos agredieron físicamente a Martínez Blanco y a Montiel, dejando al primero policontundido con golpes de pies y manos y objetos contundentes; Rosalba Montiel insistió en parar la violencia. Fue empujada y tirada al suelo donde le propinaron golpes con los pies, quebrándole dos costillas. Aunque se procedió a solicitar la intervención de la policía, los agentes se abstuvieron de actuar en consecuencia; no obstante la flagrancia de la agresión desatada por los integrantes del grupo Unimos.
Al tomar conocimiento de los hechos, Ignacio Yris Salomón, secretario general del CEN del PH, demandó a las autoridades federales y estatales profundizar en las investigaciones y actuar en consecuencia; asimismo demandó a las autoridades estatales garantizar la seguridad plena de los integrantes del Partido Humanista, luego de conocer de la inacción de las corporaciones policiacas.
