Heriberto Villarreal Flores, presidente de la
Asociación Nacional de Institutos Municipales de Planeación, reconoció aquí que en el pasado hubo errores en la planeación para el adecuado desarrollo de las ciudades, lo que hoy significa costos incalculables para las actuales administraciones.
A pesar de ubicar a México como “un país ordenado” en materia de urbanismo, dijo que en el pasado se cometieron errores, tales como ubicar las zonas de trabajo alejadas de la concentración poblacional, lo que hoy significa graves problemas viales y costos incuantificables.
“Antes se impulsó el Crecimiento Modulado, pero no se pensó en el costo de traslados”, precisó y añadió que “hay soluciones para contar con ciudades más amigables a la convivencia social”.
Lamentablemente, agregó, faltan recursos para aplicarlos en los Institutos Municipales de Planeación. “No hay recurso que alcance”, puntualizó.
Advirtió que el IMPLAN en cualquier municipio del país, debe conducirse al margen de intereses políticos y económicas. “Debe evitar representar intereses de los grupos inmobiliarios o constructores pues su principal propósito es garantizar la planeación en un interés colectivo y garante de las políticas públicas”, puntualizó.
Para mejorar los espacios urbanos se requiere de la decidida participación ciudadana y la coordinación con los Consejos de Planeación para el Desarrollo Municipal, COPLADEM.
“Es más caro destruir y construir, que empezar de cero”, admitió Villarreal Flores, quien reconoció que “no hay dinero que alcance para corregir los errores del pasado” que han puesto a las ciudades en un entorno de difícil urbanidad.
Cabe destacar que la asociación de Implanes apenas agrupa 55 ciudades, de 2 mil 500 municipios existente
