Durante la presentación del Código de Ética y Conducta para los burócratas de la Auditoría Superior del Estado se reveló que diversas fuentes internacionales, como la prestigiada revista Forbes, ubican a San Luis Potosí como el Estado número uno en todo el mundo en materia de corrupción. Tan sólo en el último año de ejercicio público, fiscalizado por el Congreso del Estado, se procedió con 312 sanciones contra servidores públicos.
En materia de la administración municipal, se reveló existen 13 denuncias penales y 12 más están en curso para ser presentadas ante la Procuraduría General de Justicia en el Estado, dijo, por su parte, el diputado Alfonso Díaz de León Guillén, presidente de la Comisión de Vigilancia de la LX legislatura local.
De igual forma, se reportó que en la entidad potosina existen 112 entes auditables para los que se deben endurecer las sanciones contra funcionarios que sean cómplices de irregularidades, con la próxima aprobación de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
En ese contexto, se solicitó a los aproximadamente 300 integrantes fiscalizadores de la Auditoría Superior del Estado conducirse con ética y profesionalismo, evitar una actuación por amiguismo, compadrazgo y situaciones de corrupción.
Se informó que próximamente será sometida al pleno del Poder Legislativo la iniciativa para que los contralores municipales no sean designados por los 58 alcaldes, no tengan compromisos políticos partidistas y sean designados por ternas de personas honestas, a fin de que su actuación sea garante de la protección de los intereses de la ciudadanía potosina.