Frescura, gracia, disciplina, talento y virtuosa voz fueron los ingredientes que imprimieron los Niños Cantores de Viena durante su presentación en el Teatro Diana.
Con su tradicional uniforme marinero, 24 menores de entre 10 y 14 años acapararon la atención de cientos de tapatíos, quienes disfrutaron cada uno de los temas interpretados; los protagonistas conquistaron al público con bailes típicos de Austria.
Situado en medio del coro y tocando su piano, el director Gerald Wirth preparó un concierto para la gente que gusta de la música, a la vez que dirigió al grupo de niños con un orden impresionante.
En cada tema los menores se colocaban de manera distinta para unir las voces que debían resaltar y lo más agradable de la velada fue cuando tres niños se pusieron al frente para representar bailes típicos de Austria, provocando emoción y sonrisas entre el público.
Entre los Cantores de Viena están dos niños mexicanos Antonio López- Ríos e Iván Reséndiz, de ocho y nueve años, respectivamente.
Una vez más este ensamble vocal demostró por qué es considerado uno de los más impresionantes de la historia, luego de que fue fundado a petición del emperador Maximiliano I en el siglo XV. A pesar del paso del tiempo, este coro sigue ofreciendo talento y destreza interpretativa con la selección de sus integrantes, de tal forma que de manera paulatina, la propuesta evolucionó hasta convertirse en un sinónimo de orgullo y patriotismo.
