Estudiar fuera, clave para potenciar el #Talento

Escribía el 27 de junio en Crónica, justo después de que el INEGI publicara la última tasa de desempleo, sobre cómo la situación de las 2 millones y medio de personas sin trabajo y las 30 millones de personas en situación de informalidad, tiene sus raíces en la marginación por la pobreza y en la falta de una educación que genere habilidades críticas para emprender y para competir en el mercado laboral.
El problema de generar habilidades críticas tiene muchas dimensiones y atenderlo implica emprender varias “batallas” a la vez.
Hay un frente el acceso a la educación, otro en la capacitación de profesores, otro en revisar el contenido educativo y la forma de enseñarlo, y otro frente en impulsar más talento .
Hacia adelante en el itinerario educativo para contar con más personas con preparación más avanzada y especializada.
Haciendo una radiografía rápida del nivel de escolaridad de la población en base a datos del censo de 2010 encontramos que de los mexicanos de más de 12 años: 6 de cada 10 tenían algún nivel de educación básica, casi 2 de cada 10 preparatoria, y poco más de 1 de cada 10 licenciatura.
En datos duros, de 58 millones de personas de más de 25 años, solo 8 millones contaban con licenciatura, es decir, menos del 15% de los adultos tienen educación superior.
En comparación, esta misma cifra para Canadá es de 51%, para Japón 45%, para E.U. 42%, y para Reino Unido 38%.
El panorama es todavía menos alentador en la cima del itinerario educativo, porque menos de 1 millón de mexicanos tienen un posgrado, y en la mayoría de los casos la barrera principal es financiera.
Conacyt apoya año con año con becas a la quinta parte de la matrícula de posgrado nacional, con foco en el ámbito científico.
La barrera es más alta cuando se trata de estudiar un posgrado en el extranjero.
En México se estima que salen a estudiar un posgrado al extranjero menos de 2,000 mexicanos cuando, en contraste, de la India van a estudiar un posgrado solo al Reino Unido, cerca de 10,000 estudiantes.
Una institución que destaca en el apoyo económico a personas que quieren estudiar un posgrado en una institución de referencia en el extranjero particularmente en un área no científica, como puede ser un MBA o una maestría en finanzas o en derecho, es la Fundación Mexicana para la Educación, la Tecnología y la Ciencia (Funed), que ha ayudado a casi 3,000 becarios desde 1994, y este año apoyará con un crédito a cerca de 400 personas que quieren estudiar una maestría. Además generan incentivos para que estos estudiantes vuelvan a México a aplicar sus nuevos conocimientos y habilidades.
Según datos de la OCDE hay más de 800 mil mexicanos residiendo en el extranjero con posgrado (casi tantos como los que hay en México), por lo que es vital conseguir que vuelvan.
Como soy becario Funed, el miércoles pasado me invitaron a un desayuno para dar mi testimonio de mis experiencias antes, durante y después de estudiar mi maestría a un grupo pequeño de estudiantes que empiezan la suya en septiembre apoyados con un crédito.
A este desayuno asistió también Raúl Medina Mora, quien fuera patrono presidente del Monte de Piedad, desde donde pilotó el programa “Generación Bicentenario” que impulsa a los 1000 mejores estudiantes mexicanos seleccionados en 2010.
Entre otras cosas, Raúl nos contó la historia de la guerrerense Stephanie González, alumna del programa y campeona de la Olimpiada del Conocimiento, a quien sorprendió a todos en 2011 por su discurso crítico ante el presidente Calderón, y que hoy estudia en el ITAM con la Beca Bailleres después de hacer un examen de admisión modelo.
¡Necesitamos más historias como ésta!