Así quedó la nariz de Thiago Motta después de la agresión.

El Arsenal del chileno Alexis Sánchez, que debutó en la Liga inglesa, logró una agónica victoria ante el Crystal Palace gracias a un gol en el tiempo añadido del galés Aaron Ramsey (2-1), cuya «maldición» cuenta que cada vez que anota un gol, un personaje público muere.
En el primer partido de la Premier esta temporada, el noruego Brede Hangeland sorprendió a la media hora de juego a un Arsenal que dominó el balón de principio a fin. Los «Gunners» forzaron el empate al filo del descanso con un remate de cabeza de Laurent Koscielny, mientras que Ramsey, cuando el Palace ya estaba con diez por la expulsión de Jason Puncheon, se hizo con un balón perdido en el área pequeña con el tiempo cumplido y dejó in extremis los tres puntos en el Emirates.
El técnico Arsène Wenger no dudó en dar entrada de inicio a la primera oportunidad a su flamante fichaje de este verano, Alexis Sánchez, que llegó del Barcelona por 38 millones de euros y que hoy entraba por la derecha del ataque «Gunner».