Los abogados del líder minero Napoléon Gómez Urrutia aseguran que su cliente es blanco de una persecución política, por lo que las “imputaciones falsas” presentadas en su contra en México no afectaron “ni remotamente” el complejo proceso mediante el que se le concedió la ciudadanía en Canadá el 30 de junio pasado.
Por medio de un comunicado del gremio, los abogados David Martin, de Canadá, y Marco Antonio del Toro, de México, aseguraron que “mientras en México corren versiones que muestran que hay quiénes todavía pretenden continuar con un asunto moribundo -en tanto se ha demostrado de manera reiterada la inexistencia de delito-, en Canadá se le otorgó la ciudadanía, un país que le abrió sus puertas en medio de una persecución política”.
Expusieron que “el estatus jurídico del Licenciado Napoleón Gómez Urrutia en Canadá es ahora el de ciudadano. Naturalmente conserva la nacionalidad mexicana de conformidad con el artículo 37 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que sobre el particular señala que ningún mexicano por nacimiento -que es su caso-, pueda ser privado de su nacionalidad ni de sus derechos, incluso cuando se adopta una segunda”
Los abogados explicaron que su cliente “tenía antes la situación migratoria de residente permanente, la que le fue conferida por escrito en el que la autoridad canadiense expresamente afirmó considerar como no fundadas las acusaciones formuladas en México. Nunca fue asilado político ni jamás ha sido prófugo de nada ni de nadie como erróneamente se ha mencionado malintencionadamente”.
Indicaron que “Canadá, como país desarrollado que es –destacando su sistema de justicia de enorme solidez técnica y ética-, no ha dado entrada a acusaciones evidentemente falsas e idénticas a otras que ya dieron lugar a declaratorias de inocencia firmes”.