Torbellinos no es por un castigo de Dios: Arizmendi

Los pobladores de San Cristóbal de las Casas han dicho que estos fenómenos siempre han acontecido en está localidad, como suele ocurrir en otras partes del mundo
El obispo Felipe Arizmendi Esquivel declaró que los cuatro torbellinos que han azotado en esta localidad, no es por un «castigo de Dios, como algunos quisieran interpretarlo», mucho menos es «un aviso de que se acerca el fin del mundo», pues resultaría «una interpretación simplista».
Al término de su homilía dominical, Arizmendi Esquivel dijo que los viejos pobladores de este lugar, han dicho «que estos fenómenos siempre han acontecido aquí», como suele ocurrir en otras partes del mundo.
Pero ahora aquí se ha presentado «con más frecuencia y con efectos más desastrosos, porque no detenemos la constante deforestación y porque nuestras casas no se construyen en forma más segura».
Estimó que los árboles «son un medio natural de contención, tanto para el viento como para la lluvia», por lo que «si no hay árboles, el viento y la lluvia arrasan con lo que encuentran».
Por eso, «si no construimos las casas en forma más segura, el viento y la lluvia las destrozan. Aprendamos pues, a convivir con responsabilidad con estos fenómenos normales de nuestra madre naturaleza».
Arizmendi Esquivel explicó que este no es el momento de lamentos y echar la culpa a otros, sino de solidarizarse con las familias de 14 colonias y barrios que sufrieron daños en más de 600 viviendas.