Al reactivarse la demanda de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí de un predio para la constitución del Campus Cañada de Lobo, con miras a atender la demanda de espacios y que ya se encuentra ampliamente rebasada, el representante legal de los comuneros de San Juan De Guadalupe, Enrique González Ruiz, recordó que esta propuesta data del año de 2007.
Indicó que en aquel entonces, los comuneros expresaron su buena voluntad de contribuir con la juventud potosina; sin embargo, establecieron algunas demandas de elemental justicia que les fueron rechazadas: abrir las instalaciones universitarias a sus hijos.
Tras el rechazo, la comunidad de San Juan de Guadalupe propuso a los gobiernos estatal, municipal y federal conformar el Parque Nacional de Cañada de Lobo, como una reserva ecológica con vocación ecoturística, proyecto que fue rechazado.
González Ruiz recordó las experiencias derivadas, primero de la simulación de un contrato de compra venta entre el gobierno y presuntos particulares, en el que se involucraran los predios de Casablanca y La Ladrillera, durante el gobierno del Fernando Silva, y que representó una erogación pública de 70 millones de pesos; no obstante que dichos predios se encontraban al interior del polígono de una dotación presidencial (1950) que a su vez confirmaba la dotación de la corona española a la comunidad en los años de 1800.
Posteriormente, ya en la administración de Marcelo de los Santos, el gobierno y el Congreso local, cedieron en donación estos predios a la Universidad Politécnica y a una universidad particular: la Universidad de San Pablo, en donde no se ha dado acceso a los hijos de los comuneros; no obstante que estos predios se mantienen en condiciones de irregularidad, toda vez que la constitución define a las comunidades agrarias como imprescriptibles, indivisibles e inajenables.
