El líder América sigue imparable

La explosividad del América sigue sin ser contenida en la Liga. Las palabras de Tigres quedaron en promesa, y los felinos fueron otra presa del actual Superlíder, que sigue con paso invicto y marca perfecta en el torneo.
Dos latigazos mortales bastaron para que las Águilas se manifestaran ante un pletórico Volcán Universitario, que probó la otra cara de la moneda respecto a su debut en la fecha dos cuando armó un festín a costa del León.
Definitivamente el actual líder no es un cuadro espectacular, ni es un equipo que arrolle a sus rivales de principio a fin. Pero en el balance general, el actual dueño de la tabla siempre se las arregla para ser más que sus rivales, y al menos en estas primeras cuatro fechas, para reflejarlo en el marcador.
El resultado dejó a los de Coapa con 12 unidades en la terraza del torneo, por cinco de los felinos, que han ido perdiendo lo positivo de su balance con las jornadas.
La batalla comenzó de tú a tú, y las emociones madrugaron a los casi 42 mil aficionado que llenaron el inmueble nicolaíta. América tuvo para abrir el marcador al 2′, cuando Peralta le puso un gran balón a Osvaldito Martínez, quien con la puerta abierta pateó por un lado del poste.
Al 4′ Darío Burbano respondió desbordando por izquierda y poniendo medio gol al «Gringo» Torres, quien sin embargo cabeceó por un lado. El pecado más grande de Tigres llegaría al 10′, cuando Pizarro disparó a quemarropa, Moisés Muñoz escupió al centro, y Burbano, solo y sin marca voló lo que parecía el tanto de la quiniela.
El adjetivo «casi» se rompió al 22′, cuando Iván Estrada perdió en la salida, Peralta enfiló al área y tras una falla de Juninho fusiló a Nahuel con un rayo de pierna derecha, reventando las redes casi sin ángulo.
Para el complemento Ferretti cambió su lado derecho sacando a Estrada y Pizarro, y recorriendo al «Gringo» a la contención, para mandar al campo a Jesús Dueñas y el refuerzo estelar, Joffre Guerrón, quien intentó desequilibrar pero acabó borrado del partido.
Y mientras la reacción de Tigres quedaba sólo en la imaginación, América capeaba el temporal y cocinaba a gusto su partido, hasta encontrar el segundo que matara.
La anotación que liquidó el encuentro llegó al 62′, cuando Peralta ganó en medio campo, y tras tocar a Jiménez éste cambió a la derecha al arribo de Layún, quien ayudado por un rebote defensivo aribó pleno al balón y lo mandó a las redes de pierna derecha.
Tigres aún sacó a Villa para ingresar a Damián, y los auriazules se desvivieron en una lluvia de centros sin ton ni son, nada que asuste a unas Águilas que lucen curtidas, y que levantan la vista al horizonte esperando por el primer valiente que las derrote en la Liga.