El actor se alista para la telenovela Yo no creo en los hombres sin dejar de lado su práctica del box
Gabriel Soto entre los diversos entrenamientos que realiza, le gusta mucho el box, uno de sus favoritos deportes de contacto, sólo que Gabriel se mantiene cuidadoso de realizar únicamente peleas de exhibición y con careta.
Soto no quiere dedicarse profesionalmente a este deporte que sabe le cambió la cara para siempre a Mickey Rourke, el actor de Hollywood que dejó atrás su porte de galán, para dedicarse un tiempo a boxear profesionalmente.
«Lo que le pasó a Mickey Rourke es que él sí dejó de actuar un tiempo y peleaba profesionalmente, yo siempre boxeo con una careta olímpica y aunque me han lastimado pómulos, ojos y la nariz, no han sido heridas graves, realmente», compartió el actor Gabriel Soto quien interpretará a «Maximiliano Bustamante», un abogado muy estricto, en la nueva versión de la telenovela «Yo no creo en los hombres».
Soto está consciente de que él es actor y no boxeador. «Me gusta este deporte porque requiere muchos sacrificios, un gran entrenamiento y una mentalidad similar a la del ajedrez en donde tienes que anticiparte a los movimientos de tu oponente», declaró Gabriel Soto quien apadrinó ayer domingo en una pelea a Jorge Sánchez, un boxeador amigo suyo, y para ello acudió a un lejano gimnasio, ubicado en los límites de Ciudad Nezahualcóyotl, cerca de Los Reyes.
«Es la segunda pelea que tiene Jorge Sánchez, mi entrenador Hugo Campos y yo queremos impulsar a los nuevos valores del boxeo, creo que esta actividad aleja a las personas de las cosas negativas como son los vicios o la vagancia. Creo que también te crea un carácter y una personalidad que te ayuda a disciplinarte en la vida cotidiana», analizó Gabriel.
En este lugar improvisado que resultó de una mezcla de un módulo de policía más una biblioteca, a la cual convirtieron en un gimnasio montándole un ring de box; Gabriel Soto llegó acompañado de su futura esposa Geraldine Bazán y sus dos hijas, Elisa Marie y Alexa Miranda además de su cuñado Ángel Claude quienes junto con otras 70 personas más, disfrutaron de una deportiva tarde, viendo peleas, comiendo palomitas, gelatinas y refrescos.
Tras el reto que lanzó Gabriel Soto a Salvador Zerboni para que boxearan juntos, aclaró. «Lo que queremos hacer va a ser una pelea de exhibición rumbo a la final de «The Ultimate Fighter Latinoamérica, pero va a ser algo totalmente distinto, aparte del formato y de la seriedad que exige este programa ya que los que pelean en ese ring octagonal, son profesionales con años de entrenamiento», puntualizó el actor.
