Un cooperante con organizaciones humanitarias que fue infectado por el mortal virus del Ebola en Liberia fue trasladado ayer desde África occidental a Estados Unidos, donde fue internado en un hospital de Atlanta para ser tratado en un área especialmente aislada.
Un vuelo médico especial que transportó al doctor Kent Brantly aterrizó en la base aérea de Dobbins en Georgia, a mediodía hora local. El médico fue llevado en una ambulancia escoltada por policías al hospital de la Universidad Emory en Atlanta, donde será atendido en una sala especialmente equipada. Noticieros de televisión mostraron cómo la ambulancia se detuvo en el hospital, donde tres personas con trajes blancos contra riesgos biológicos lo sacaron del vehículo.
Brantly trabaja para un grupo cristiano que tiene su sede en Carolina del Norte. Estaba previsto que otra persona infectada de la organización, la misionera Nancy Writebol, llegara más tarde en otro vuelo del mismo avión, que está equipado para transportar a un solo paciente a la vez.
Brantly y Writebol estaban ayudando a enfrentar la emergencia generada por el mayor brote de ébola del que se tenga registro cuando contrajeron la enfermedad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde marzo han muerto al menos 729 personas a causa del virus, que no tiene cura y cuyo índice de mortalidad es de 90%.
En Nigeria, los dos casos sospechosos de ébola dieron negativo en los análisis, informó ayer el centro local para el control de enfermedades NCDC. El gobierno prohibió el traslado al país de cadáveres procedentes de Guinea Conakry, Sierra Leona y Liberia, naciones afectadas por la epidemia, para evitar la expansión del virus.
España, por su parte, desaconsejó a sus ciudadanos viajar a la región afectada por el brote.