Esta semana el pleno de la Cámara de Diputados discutió y aprobó, en sesiones de hasta 20 horas, los cuatro dictámenes que contienen las leyes secundarias de la reforma energética.
La apertura del sector energético al capital privado y extranjero suscitó discusiones entre legisladores; los de izquierda acusaron a priístas, panista y ecologistas de «traidores a la patria», y éstos últimos respondieron calificando de «vándalos» a los perredistas.
Las sesiones tuvieron una duración en promedio de entre 12 y 18 horas, donde ocurrieron intentos de toma de tribuna, un ‘funeral’ simbólico e incluso una venta de catres para el descanso de los diputados.
Una agencia a nivel nacional te presenta algunos de los momentos controvertidos de la semana en San Lázaro.
‘Funeral’ dentro de San Lázaro
El viernes legisladores del PRD colocaron en el pleno un busto del general Lázaro Cárdenas, a quien montaron una guardia de honor, junto con decenas de arreglos florales para representar de forma simbólica el funeral de Pemex y la CFE al considerar que la reforma energética entregará estas paraestatales a inversionistas privados.
El panista Jorge sotomayor acusó a los perredistas de cometer «actos vandálicos» en contra de la imagen del general, pues la escultura fue retirada de su lugar original, uno de los pasillos de la Cámara para ser usada en la citada protesta.
Víbora interrumpe debate
La noche del viernes la diputada del Partido del Trabajo, Lilia Aguilar, hablaba en el pleno de San Lázaro en contra de la reforma energética, cuando alertó a sus demás compañeros que en salón había una víbora.
Por unos instantes, el debate se suspendió debido al desorden y a la curiosidad que se presentó en distintos diputados para ver al animal.
#LadyCatres adelanta su ‘agosto’
La diputada del PAN, Elizabeth Vargas Martín del Campo, aprovechó la sesión de 20 horas de entre el lunes y el martes para vender a sus colegas catres para descansar.
Auxiliares de la legisladora llevaron al recinto varios camastros para ofrecerlos en 900 pesos cada uno, cuando se estima que su costo es de 400 pesos. El paquete incluía una almohada y una cobija, según diputados.