IMPACTO.- La reforma energética trae consigo infini-dad de impactos, difíciles de apreciar todavía. Entre ellos, podría ocasionar una seria disminución de las participaciones federales para el año entrante para el Gobierno del Estado y para los municipios, en un monto todavía incuantificado por la Secretaría de Finanzas. Debe considerarse que las finanzas públicas estatales y municipales prácticamente viven de la renta del petróleo y de la generación de electricidad, principalmente de aquélla. Las recaudaciones por impuestos, tributos, aprovechamientos, multas y otras de carácter estatal o municipal, ni para pagar nómina dejan.
ESTANCAMIENTO.- De acuerdo con el INEGI, la economía potosina apenas tuvo un crecimiento de 0,7 por ciento en el primer trimestre del año, lo cual significa simple y llanamente que hay estancamiento. No se trata de una situación generalizada en el país, porque hubo otros Estados vecinos, como Aguascalientes y Zacatecas, que sí observaron mayor ritmo económico. Esto demuestra el fracaso de las políticas y sus consecuentes acciones en materia de producción y empleo. Por supuesto que habrá responsables de que haya sucedido dicha parálisis, cuando menos de los titulares de las Secretarías y direcciones correspondientes.
ESCÁNDALO.- Está por surgir a la luz un viejo y a la vez nuevo escándalo. Se trata de un viejo litigio que los ejidatarios de la Garita de Jalisco han hecho al Gobierno del Estado para el pago de una parte de las indemnizaciones por concepto de expropiación de terrenos de que fueron objeto en el ya lejano régimen de Carlos Jonguitud Barrios. En aquel tiempo se les ofreció una buena cantidad de lotes en el fraccionamiento Tangamanga; sin embargo, nunca se les entregaron. Ello ocasionó un pleito judicial, motivo por el cual demandan ahora… ¡3 mil millones de pesos! Será cuando vuelva de vacaciones la burocracia, cuando estallará este asunto.
CENTRO.- Entre los trabajos que se harán con motivo del denominado Plan del Manejo del Centro Histórico se encuentra el mejoramiento urbano con bancas, alumbrado y reforestación de las calles de Mariano Arista, entre Reforma y Allende; de Zaragoza, entre Pascual M. Hernández y Los Bravo; de Venustiano Carranza, entre Reforma e Ignacio Allende; y de Madero. Para ello, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano informó que destinará 7 millones de pesos, además de otros 3 millones de pesos que pondría el Ayuntamiento. Parece muy pobre esa suma de dinero, aunque es mejor que nada.
MULTITUDES.- Los templos católicos congregaron multitudes en esta Capital potosina. Cientos y miles de personas acudieron a ellos en distintas horas del día para bendecir el agua y adquirir las medallas, estampas y oraciones de San Ignacio de Loyola, que, según la creencia, tienen el poder de exorcizar a los demonios que se han alojado en el cuerpo, el alma, el corazón y la mente de no pocas personas. Ignacio de Loyola es considerado como el segundo más grande exorcista de la Iglesia Católica, sólo después de Jesús, quien, a decir de las narraciones bíblicas expulsó los demonios del cuerpo de muchos de sus seguidores.
AGLOMERACIÓN.- La aglomeración en los templos católicos en esta Capital potosina dio cuenta de un fenómeno social de miedos recurrentes, estrés, desesperanza y fuertes daños psicológicos entre la gente. Tanto que ayer acudieron masivamente y en grupos familiares a la ceremonia de la bendición del agua, uno de los signos vitales de la fe católica.
INCONFORMIDAD.- Las obras de vialidad en Avenida Muñoz hicieron recrudecer los signos de inconformidad y desesperación entre quienes habitan en las inmediaciones; y es que éstas han terminado por bloquear los accesos de los residentes, incrementar los índices de inseguridad y, con las lluvias recientes, en generar afectaciones graves a sus patrimonios.
