Por las recurrentes agresiones físicas y verbales de las cuales son objetos tanto por parte de su madre como de un hermano, dos niñas de edad decidieron huir de su domicilio, un amigo de la familia al darse cuenta de la desaparición de las menores las reportó y se activó la alerta Amber. Las pequeñas no estaban desaparecidas, simplemente se salieron de la casa, su hermano amenazaba con matarlas.
La madre de las menores fue retenida por la Policía Preventiva Municipal, quienes la pusieron a disposición de las autoridades competentes en la materia.
Los hechos ocurrieron el día de ayer a las 19:40 horas cuando elementos de Fuerzas Municipales se desplazaban en recorrido de seguridad y vigilancia, contando con el reporte de dos niñas extraviadas por la zona, cuando al llegar a la calle América del Sur y República de Venezuela pudieron observar a dos menores que se encontraban llorando y correspondían a las características mencionadas en la alerta.
Los gendarmes detuvieron la marcha y descendieron de la patrulla para hablar con las pequeñas, las cuales se encontraban asustadas en compañía de algunos vecinos del lugar que trataban de hablar con ellas.
Dijeron las pequeñas se habían escapado de su casa pues habían sido amenazadas de muerte por su hermano, Luis N., quien con un cuchillo en mano les había dicho que las mataría por lo cual no deseaban regresar a su domicilio.
Además las niñas pidieron a los policías las llevaran a casa de su abuela, ya que tampoco deseaban estar con su madre pues las maltrataba física y verbalmente, además de dejarlas solas al cuidado de su hermano y sus amigos, obligándolas a realizar tareas domésticas.
Fueron los policías a la casa de las menores donde se entrevistaron con la madre, quien manifestó que estaba en búsqueda de las niñas y que estaba de acuerdo en que se quedaran con su abuela, ya que no era la primera vez que ocurrían estos problemas. En el lugar se informó que la alerta AMBER había sido activada por un amigo de Luis, el hermano de la pequeñas, el cual al notar la ausencia de las pequeñas hizo la llamada. Explicaron los agentes a la mujer Lorena Janeth Aguilar Arredondo, de 29 años de edad, que la violencia intrafamiliar era un delito y que sería trasladada a la comandancia central para posteriormente, ser puesta a disposición del Agente del Ministerio Público del fuero común para que defina responsabilidades. Las niñas fueron entregadas a la Procuradu