Una docena de campesinos representantes de varias comunidades del altiplano se presentaron ayer frente al Palacio de Gobierno con el objeto de llamar la atención de las autoridades estatales sobre la urgencia de su intervención para “rescatar al campo de las condiciones de miseria en que se encuentra”.
Campesinos de Mexquitic, Villa de Zaragoza, Armadillo de los Infante, Villa de Ramos, Villa de Hidalgo y Santo Domingo solicitaron audiencia para exponer su situación de carencia de granos para la siembra de verano, y de recursos para solventar los gastos de operación de los sistemas extractores de agua, y que se han incr+ementado hasta el punto de ser para ellos insos+tenibles, por las tarifas de la Comisión Federal de Electricidad y el costo del diesel y la gasolina.
La representación agrícola fue atendida ayer por el subsecretario de gobierno, Miguel Martínez Castro, quien comprometió una audiencia con las autoridades del sector agropecuario, a fin de analizar su situación y resolver sus demandas en la medida de lo posible.
Les aseguró que la administración estatal encabezada por el doctor Fernando Toranzo es consciente y sensible a la difícil realidad de los hombres y mujeres del campo potosino por lo que ha establecido como prioridad su atención.
El gobierno de San Luis Potosí ha redoblado esfuerzos a través de distintas dependencias, para ofrecer respuestas a las demandas de cobertura de rezagos que se han venido profundizando de manera por demás alarmante entre las comunidades rurales y de manera más dramática en las comunidades indígenas de San Luis Potosí.
La representación campesina presentó cartulinas en las que se recogían las leyendas y demandas de los movimientos agraristas de México, entre los que se advierte que “Sin maíz no hay país” y, asimismo demandas para que la representación social en el Congreso Local asuma la responsabilidad de trabajar realmente por sus representados, atendiendo sus voces que reclaman la reversión de las reformas que hoy los mantienen sin oportunidades de crédito, sin acceso a la semilla mejorada y sin garantías jurídicas de la propiedad, particularmente de la propiedad comunal.