Policías detuvieron a un sujeto, al cual se le señala como supuesto responsable de haber mando dar muerte a su novia, hechos ocurridos en el Estado de Guanajuato. El sospechoso se encontraba oculto en Santa María.
Fue en una colonia del municipio de Santa María del Río, agentes de la Policía Ministerial del Estado detuvieron en cumplimiento a oficio de colaboración, a un guanajuatense que en febrero del 2013 en ese Estado, ordenó la ejecución por golpes y estrangulamiento de su novia, Irán Eunice Cortes Zapata, quien contara con 18 años de edad, “porque estaba embarazada y le iba a echar a perder su vida”.
El presunto se llama Sergio Eduardo N., (a) “El Rubén”, de 18 años de edad, quien luego del crimen y de darse cuenta que las autoridades Ministeriales de Guanajuato le seguían los pasos como sospechoso del homicidio, decidió refugiarse en Mariano Abasolo, sin número, en la colonia Gustavo Díaz Ordaz de Santa María del Río, donde fue ubicado y detenido.
Según los autos del expediente, refieren que el 3 de febrero se realiza el hallazgo del cuerpo sin vida de una persona del sexo femenino, la cual presentaba golpes contusos en el rostro y al parecer había fallecido a consecuencia de asfixia por estrangulación en un camino de terracería a la comunidad de Puente Grande en el municipio de Valle de Santiago, de dicho Estado.
Luego de lograr identificar a la víctima, se establece que la última vez que se le vio con vida, fue un día antes del hallazgo y precisamente cuando el ahora indiciado había ido por ella a su domicilio.
Al ser interrogado, declaró haber sido víctimas de un secuestro por varios desconocidos, quienes se la quitaron y se la llevaron en la misma camioneta que él conducía, la cual posteriormente fue localizada aparentemente abandonada en despoblado. Pero en las investigaciones se evidencia la presunta responsabilidad del novio en la muerte de Irán, por lo que huye con destino al municipio potosino ya referido, donde fue capturado y puesto a disposición del Juez Segundo Especializado para Adolecentes del Estado de Guanajuato.
Se confirmó que “El Rubén” había contratado a dos matones a los que les pagó 20 mil pesos para que ultimaran a Eunice y así no le frustrara su vida por su embarazo.
También se supo que él mismo fue por ella a la casa y la entregó a los ejecutores, quienes la condujeron hasta el sitio donde fue encontrado su cadáver, donde la golpearon hasta el cansancio y finalmente la asfixiaron, causa por la que el detenido tiene cargos por el delito de homicidio calificado.