Entre más distinto sea el desenlace de la relación amorosa respecto de lo que imaginó, más sufrirá la salud mental de la adolescente que la vivió.
Así lo dio a conocer un estudio de la Universidad de Nuevo México en el que se entrevistaron a 5 mil 300 estudiantes de secundaria antes y después de tener una relación amorosa.
El investigador, Robert Wood Johnson, vio que en todos los casos ellas eran las más afectadas al término de la relación.
«Encontré que el riesgo de caer en una depresión severa, de tener pensamientos suicidas y de incluso implementarlos aumenta cuanto más difieren sus relaciones de lo que esperaban», dijo en el sitio de la universidad.
Por el contrario, el investigador no encontró ninguna evidencia de que una situación así, en la que el desenlace de la relación difiera de lo que se imaginó en un principio, contribuya a la mala salud mental entre los varones.
Wood considera que las relaciones románticas son componentes particularmente importantes de la identidad de las adolescentes. «Por tanto, cómo sea la relación está muy relacionado con cómo se sienten acerca de sí mismas, para bien o para mal», explicó. En cambio, los muchachos son más propensos a construir sus identidades alrededor de los deportes y de otras actividades extracurriculares.
«Esta podría ser la razón que explica por qué no se ven afectados por una mala relación», dijo.
Por eso, considera importante que se incentive a las muchachas a construir sus identidades en torno a cosas distintas de las relaciones románticas para así mitigar los efectos de una relación en su salud mental.
