Hallan monolito en Aguascalientes; será exhibido entre sus habitantes

El presidente municipal de Calvillo, Javier Luévano Núñez, en compañía del delegado estatal del INAH, Alberto Ramírez Ramírez, informó que la pieza prehispánica encontrada la víspera será trasladada para mantenerla a salvo y exhibida entre los habitantes.
El edil refirió que si se queda donde está podría ser blanco fácil para los perpetradores, sin embargo, el procedimiento, las herramientas y las técnicas de extracción deben ser plenamente estudiados para evitar posibles daños.
Garantizó que el lugar estará protegido por el ayuntamiento y una vez bajo el resguardo de la autoridad, la pieza será exhibida en el Museo Municipal, para conocimiento y disfrute de los habitantes de Calvillo.
Se trata de un monolito de 10 toneladas localizado en la cascada de los Huenchos, con un grabado en relieve de una figura humana, aparentemente masculina en posición de vigilante, que porta tocado y orejeras como elementos ornamentales.
Por sus características de diseño se asocia al periodo clásico teotihuacano, una escultura invaluable y única en el estado y la región, según especialistas.
Derivado de una denuncia ciudadana donde se reportó a las autoridades el presunto saqueo de una pieza arqueológica en la citada cascada, el munícipe giró indicaciones para que se montara un operativo de vigilancia y resguardo permanente en la zona por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Protección Civil y el Ejército Mexicano.
Igualmente solicitó el apoyo del gobierno estatal y la delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para la valoración de la pieza y operar los protocolos a seguir en estos casos.
La pieza arqueológica sufrió un ataque vandálico y no sólo había marcas de corte, sino que parte de la roca ya había sido demolida alrededor de la figura, al intentar desprenderla del enorme monolito.
Este monumento podría provenir de una población asentada en el valle de Huejucar (hoy Calvillo), previo a los asentamientos chichimecas.
Un informe preliminar de la arqueóloga Ana Pelz Marín, del INAH en Aguascalientes, indica que la figura mide 45 centímetros de ancho por 75 de alto, la piedra sobre la cual fue tallada es una toba volcánica, identificada como cantera roja y tiene dimensiones de 1.5 metros de ancho, 1.55 de altura y 2.1 metros de profundidad.