Telecom, amplia legitimidad

Las leyes secundarias en telecomunicaciones pasaron ya la primera aduana legislativa. Y lo hicieron con amplia legitimidad, mayor de la que se esperaba. Recibieron en el Senado el aval de representantes de todo el espectro ideológico. Este singular desenlace, en las mejores condiciones políticas, se perfiló desde la salida del dictamen de las comisiones de estudio. El paquete mereció entonces respaldo no sólo del PRI y su aliado el PVEM, sino también del PAN y aun del PRD y PT.
Con la luz verde del pleno senatorial pasará a revisión a la Cámara baja, donde continuará el jaloneo de la oposición de izquierda; sólo que con nulas posibilidades de modificaciones.
Si en efecto la política es el arte de lo posible, resulta obligado reconocer el éxito en la culminación del trámite en la Cámara alta, más allá del contenido duro o ligth de los nuevos ordenamientos.
Se necesitaría estar cegado por la furia antigobiernista para negar que, frente a lo que se tenía, lo logrado para beneficio de los usuarios de los servicios de televisión, radio y telecomunicaciones representa un avance considerable. ¡Lástima que el país tuvo que esperar dos décadas para que esto sucediera!
En el tránsito de la polémica iniciativa por Reforma 135 ganó el debate democrático. Porque sólo dejó de opinar quien así lo quiso. A despecho de los sistemáticos opositores del PRI y el gobierno, la bancada encabezada por Emilio Gamboa Patrón dio prueba de apertura a la discusión y voluntad de escuchar. Mejor aún, de disposición para atender las propuestas útiles y razonables de la oposición.
¡Suman 70 los cambios del documento final respecto a la iniciativa original! Y las bondades de la nueva legislación son patentes.
Van tales bondades de la eliminación de costos para larga distancia fija y móvil, el establecimiento de un amplio catálogo de derechos para los usuarios y audiencias y el fomento de la competencia, al fortalecimiento a las concesiones sociales, la cobertura de servicio de telecomunicaciones a zonas rurales, y el aumento en la oferta de canales y contenidos de TV.