Cinco personas han sido hospitalizadas en el este de Hungría, según las autoridades sanitarias, y se sospecha que comieron carne infectada con ántrax.
Se han hallado rastros de la letal bacteria en carne de dos vacas, según el Servicio de Servicio Médico y Sanidad Pública Nacional. Los animales fueron sacrificados de forma ilegal en la localidad oriental de Tiszafured y la carne se congeló de forma inadecuada.
Parte de la carne fue transportada a una empresa que gestiona hoteles, restaurantes y otras instalaciones. La cocina de la empresa ha sido cerrada.
Las autoridades han pedido a la gente que pueda haber consumido la ternera infectada que visite a un médico, dado que tratamiento temprano es el más efectivo.
Como medida de precaución, se están proporcionando antibióticos a las personas que puedan haber entrado en contacto con la carne infectada.
No había riesgo inmediato de que la enfermedad se extendiera, según las autoridades, que estaban emprendiendo una campaña de vacunación a animales en la zona que pudieran haber estado expuestos a la bacteria.