Un pequeño grupo de recolectores privados, agremiados al Movimiento del Pueblo Libre ingresó a la Plaza Principal de Soledad para reclamar su derecho de audiencia constitucional al presidente municipal Ricardo Gallardo Cardona, al considerar que han resultado dañados en sus fuentes y medios de trabajo.
Se trata de recolectores que hasta hace poco venían operando con vehículos de tracción animal por el sistema de cuota voluntaria pero que, a raíz de las modificaciones instrumentadas al Reglamento de Tránsito municipal, han sido sacados de la circulación.
Indicaron que las propuestas realizadas por la administración municipal se colocaron fuera de su alcance, al carecer de recursos para cambiar los carretones arrastrados por caballos y mulas por el sistema motorizado: cuatrimotos, trimotos y camionetas pick-up adaptados para prestar dicho servicio.
Al arribar a las instalaciones del Palacio de Gobierno Municipal su ingreso fue obstruido por un dispositivo policíaco, toda vez que en el inmueble público, en el auditorio, se realizaba en esos momentos un evento relacionado con la Feria Municipal del Empleo.
Los manifestantes indicaron que sus condiciones económicas y aún educativas-formales les impiden acudir a la búsqueda de empleos diferentes a la recolección de residuos sólidos municipales, desechos domésticos, industriales y comerciales, por lo que consideraron injusto que se les niegue mediante tecnicismos legales un derecho que es tutelado por la Constitución: el derecho a trabajar.
Consideraron que el no permitirles circular en la jurisdicción de Soledad de Graciano Sánchez constituye un acto de discriminación de las autoridades que juramentaron al asumir sus responsabilidades, servir a la sociedad, precisamente sin discriminación, sin distingos de ninguna clase, respetando derechos consagrados por la ley. Indicaron que de ninguna manera están en la búsqueda de confrontaciones con las autoridades municipales, sino que la postura que sostienen es la del reclamo al respeto de los derechos que les asisten a trabajar honradamente, toda vez que el servicio de recolección de desechos sólidos municipales, domésticos y comerciales no está tipificado como un delito.