«Mojarras» Rodríguez obtuvo su segunda victoria

El pugilista potosino de 17 años Carlos Mohamed «Mojarras» Rodríguez Gámez, obtuvo el fin de semana la segunda victoria de su naciente carrera boxística al imponerse al tlaxcalteca Antonio Briseño por nocaut.
El duelo se celebró el viernes en la localidad de San Pablo, Tlaxcala y en la categoría Super Pluma en 59 kilos.
Su rival ostentaba el record de una pelea ganada y una derrota, la pelea fue la cuarta de la velada; «Mojarras» abandonó su esquina para el llamado round de estudio pero, desde luego, buscando la oportunidad de debilitar a Briseño buscando minar su fuerza con el gancho y de esa forma lo envió a besar la lona.
El tlaxcalteca se recuperó y en el segundo round el potosino se dedicó a boxearlo con una serie de combinaciones, golpes que llevaban dirección hacia la mandíbula pero sobre todo a la zona hepática de su rival con una serie de ganchos bien colocados.
Al concluir el segundo episodio, en la esquina de Antonio Briseño se tomó la determinación de no permitir que continuara en la contienda y de esa forma se declaró el nocaut.
Recordamos que Carlos Mohamed debutó hace apenas hace un mes cuando el sábado 29 de mayo en la Sala de Armas de la Magdalena Mixuca del DF venció por ko a los 45 segundos del primer asalto al guanajuatense Mariano Fonseca.
Estamos ante la presencia de los albores de la carrera de un potosino que se va a caracterizar por la contundencia de su pegada y se ganará fama de noqueador entre la comunidad del deporte de las orejas de coliflor.
Mohamed, nacido en San Luis Potosí, inició su formación en los gimnasios municipales y posteriormente en el Gimnasio del Inpode hasta la fundación del Gimnasio Destroyer’s Team dirigido por su padre y entrenador Carlos Rodríguez.
Luego de su paso por el boxeo amateur con la asistencia a dos Olimpiadas Nacionales, culminó la etapa en el Regional de 2014 intentando sumar su tercera Olimpiada.
Tras este certamen optó por dar el gran salto al profesionalismo reafirmando su vocación por el boxeo y abrazando con firmeza el sueño de convertirse en figura de este deporte.
Sus cualidades le hicieron ser observado por el legendario entrenador veracruzano Ignacio «Nacho» Beristain quien lo incluyó en su establo y lo ha apoderado en exclusiva para la firma de sus primeros contratos.