La población de pingüinos emperador se verá dramáticamente mermada a finales de este siglo por culpa del cambio climático. Así lo afirma un estudio dirigido por la Institución Oceanográfica de Woods Hole (WHOI, en sus siglas en inglés) publicada en la revista Nature Climate Change. Los investigadores, que en 2009 llegaron a una conclusión similar estudiando una única colonia, la de Terre Adélie (en la Antártida oriental), han recopilado datos de las 45 colonias de esta especie que acoge actualmente el continente helado. Y sus conclusiones son demoledoras: dos tercios de las colonias disminuirán su población más de un 50% antes de final de siglo.
La clave de la supervivencia de los pingüinos emperador (Aptenodytes forsteri) está en el hielo marino. Estos animales dependen de él para la cría, la alimentación y hasta la muda de las plumas. Si se reduce tal y como prevén las actuales proyecciones del IPCC, el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, la población de estas icónicas aves se verá muy afectada, señalan los expertos. «Se calcula que la población global habrá descendido al menos un 19% para entonces», escriben en la revista.
«Si el hielo marino decrece al ritmo previsto por los modelos climáticos del IPCC, y continúa influyendo a los pingüinos como lo hizo en la segunda mitad del siglo XX en Terre Adélie, se prevé que al menos dos tercios de las colonias disminuyan su población actual más de un 50% en 2100», asegura la bióloga del WHOI Stephanie Jenouvrier. «Ninguna de las colonias, ni siquiera las más meridionales en el mar de Ross, constituirán un refugio viable para finales del siglo XXI», añade.
Los investigadores explican que el papel del hielo marino es complicado. Por un lado, si hay demasiado, los pingüinos tienen que recorrer distancias más largas para llegar al océano, cazar y volver con alimento para las crías. Por otro, si hay menos hielo, se reduce el hábitat del kril (unos pequeños crustáceos que son el alimento fundamental de muchas especies antárticas), la base de la alimentación de los pingüinos emperador. Los modelos que los investigadores usan en su trabajo tienen en cuenta los dos escenarios, explican.
El estudio insta a los Gobiernos a poner a estas aves en la lista de animales en peligro. Organizaciones ecologistas han propuesto que se creen reservas marinas en el mar de Ross y frente al este de la Antártida, algo a lo que se opone Rusia, informa Reuters, que cita a Andrea Kavanagh, del Pew Charitable Trusts: «Las reservas marinas son una de las mejores maneras de proteger a los pingüinos».
Un estudio publicado en la revista PLOS ONE en abril de 2012 estimó la población total de esta especie mediante imágenes de satélite de alta resolución: unas 600.000 aves adultas. Sobre esta estimación han trabajado los científicos de WHOI, con la ayuda de otros equipos franceses y holandeses.