La alegoría como motivo de creación entre los siglos XVI y XX

La alegoría es una de las principales herramientas creativas de pintores, escultores y artistas gráficos de todos los tiempos, como se aprecia en la exposición más reciente del Museo Nacional de San Carlos.
Para Adolfo Mantilla, curador de la muestra Retóricas de modernidad y desencanto, conformada por 55 obras de artistas nacionales y extranjeros nacidos entre los siglos XVI y XX: “No hay una obra de arte que no tenga un sustrato alegórico. La concepción de los artistas siempre está en función alegórica de los lenguajes, no importa si es en la literatura, el teatro o la pintura”. A través del recorrido por la exhibición, el especialista explica a M2, que los artistas de esta muestra usan la alegoría de manera sistemática como instrumento para la representación de sus componentes imaginarios.
Esto se puede constatar a través de las obras de creadores como Karl Audran, Auguste Rodin, Andrea Pozzi, Rafael Sanzio, Paul Sigmund Habelman, Samuel von Amsler, Manuel Vilar Roca, Jan Ijkens y Victor Wolfvoet, entre los extranjeros y los mexicanos Juan O’Gorman, José Chávez Morado, David Alfaro Siqueiros, Arturo García Bustos, Alberto Beltrán, Jorge González Camarena y Ángel Bracho, entre otros.
“La exposición hace un recorrido cronológico de cinco siglos, desde el Renacimiento hasta el siglo XX. A lo largo de esa temporalidad hay una selección de obras de distintos contextos geográficos, tanto europeos como americanos, que dan cuenta de la manera en que sus lenguajes se modulan respecto de sus realidades, para hace un registro de los imaginarios, los valores y los sistemas axiológicos de la modernidad”, precisa el doctor en antropología y maestro en Historia del arte