Habitantes de los pueblos de Nagorno Karabaj comenzaron a incendiar sus casas durante la tarde este sábado antes de huir hacia Armenia y de que autoridades el país de Azerbaiyán recupere el control de algunos territorios de la provincia el día de mañana. «Es el último día, mañana los soldados azerbaiyanos estarán aquí», dijo un militar en el pueblo de Charektar.
Cabe señalar que un acuerdo de paz firmado entre Armenia y Azerbaiyán, negociado por Rusia, fue lo que puso fin a intensos combates en la república autoproclamada de Nagorno Karabaj durante varias semanas, dicha región es un enclave montañoso disputado desde hace décadas entre estos dos países. El presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíev, y el jefe de gobierno de Armenia, Nikol Pashinián, fueron quienes firmaron el pasado 9 noviembre junto al líder de Rusia el documento en el que «declaran un completo alto al fuego y un cese a todas las hostilidades» a partir de la medianoche de este martes, con el que ambos bandos mantienen «las posiciones que ocupan». Ante esta situación, Bakú comenzó a reconquistar territorios que estaban bajo control armenio desde la década de los 90, cuando la región se separó de Azerbaiyán provocando una guerra que dejó aproximadamente 30.000 muertos. Por lo tanto, en respuesta a esta iniciativa los armenios comenzaron a quemar sus casas con tal de que su país contrario las obtuviera. «Es mi casa, no puedo dejársela a los turcos», dijo con firmeza un hombre mientras arrojaba leña a lo que fue su hogar por mucho tiempo.
De momento se desconoce la cantidad de viviendas incendiadas pero supera fácilmente una decena de ellas. Sobre su nuevo paradero no dieron explicaciones.
Es importante que para garantizar el cumplimiento del acuerdo, Rusia envió cerca de 2 mil soldados para garantizar el cumplimiento del acuerdo, con el que Azerbaiyán estará recuperando parte del territorio que había perdido a manos de Armenia en la guerra por Nagorno Karabaj de 1992 a 1994.