Lugares patrimonio cultural por la UNESCO en riesgo de desaparición

  • Es doloroso ser conscientes de que quizá nunca podamos verlas en persona, porque incluso sin haberlos disfrutado físicamente a todos nos resultan conocidas o, por lo menos, familiares y son importantes de alguna manera para la humanidad. La forma en que interactuamos y cuidamos el patrimonio dice mucho sobre quiénes somos y nuestra capacidad de evolución y progreso como especie, pues estamos acabando con nuestra propia historia.

Los arquitectos Jelena Popovic y Keremcan Kirilmaz, junto al diseñador industrial Erdem Batirbek han investigado e ilustrado seis de estas ubicaciones legendarias para reproducir la evolución de cómo se encuentran en la actualidad al estado original de cuando fueron construidas.
1. Hatra (Al-Jazīrah – Irak)
Hasta hace poco, Hatra era la ciudad antigua mejor conservada. Hatra fue la capital del primer reino árabe, y se la conoció como Beit ʾelāhāʾ (Casa de Dios) debido a que sus templos celebraban a los dioses griegos, arameos, mesopotámicos y árabes.
2. Leptis Magna (Distrito de Khoms – Libia)
Cuando Septimio Severo fue coronado emperador en 193 d.C., convirtió su ciudad natal en un brillante ejemplo de planificación urbana y arquitectura romanas. Leptis Magna se convirtió en la tercera ciudad romana más importante de África (después de Cartago y Alejandría) gracias a la riqueza y el poder de su famoso hijo.
3. Palmira (Tadmur, Gobernación de Homs, Siria)
Palmira se ha convertido en un emblema del patrimonio en peligro de extinción. Supuestamente, en pleno apogeo de la guerra de Siria, los militantes de Isis torturaron al jefe de antigüedades de Palmira, de 82 años, para que revelara dónde habían escondido los artefactos más importantes de la ciudad para su protección. Khaled al-Asaad, había estado a cargo del museo de la ciudad desde la década de 1960 y finalmente fue asesinado sin revelar su ubicación.
4. Fortificaciones Portobelo-San Lorenzo (Provincia de Colón, Distrito de Cristóbal, Panamá)
A partir de la década de 1590, la corona española construyó una serie de fuertes a lo largo de la costa caribeña de Panamá con el fin de proteger el comercio transcontinental.