Entre los hitos y las curiosidades de la gesta que protagonizó Pablo Carreño al clasificarse para las semifinales del US Open resalta algo que ha sucedido muy pocas veces en la historia del tenis español desde que Rafa Nadal empezó a competir en los Grand Slams de manera continuada en Wimbledon 2003. Hacía siete años que ningún otro español alcanzaba la penúltima ronda de un major sin el balear.
El último que consiguió lo mismo que Carreño en este 2020 fue David Ferrer en el Abierto de Australia de 2013, en el que no participó Nadal. En 2012, el de Jávea ya lo había logrado en un US Open al que tampoco acudió el multicampeón. En ambas ocasiones, el que fuera número tres del mundo fue apartado de la final por Novak Djokovic.
En el torneo neoyorquino de 2014 y en el de Wimbledon 2016, no jugados por Rafa, no hubo semifinalistas de la Armada. Tampoco en las otras ausencias del número dos del mundo (Roland Garros y Wimbledon en 2004).
