Cardenal, obispos y sacerdotes dan bienvenida por reapertura de templos

  • Antes de abrir los templos, se deben limpiar, sanitizar y fumigar las áreas donde estarán los fieles; los asientos deberán marcarse para respetar la “sana distancia

El arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, y su Consejo Episcopal, obispos auxiliares, y sacerdotes abrieron de forma simbólica en redes sociales las puertas de las iglesias en la nueva normalidad a partir de este domingo 26 de julio.

“Nos alegra mucho el regreso gradual a las misas con presencia de fieles, pero debemos ser muy responsables y respetar todas las medidas de seguridad ¡Cuidémonos unos a otros! ¡Cuidemos nuestra salud y la vida! Y pidamos a Dios por estar pronto todos juntos”, escribió el Facebook en cardenal.

El alto prelado de la Iglesia católica dio a conocer que, en acuerdo con instancias gubernamentales y sanitarias, se iniciará el proceso gradual para la reapertura de parroquias cerradas ante la pandemia de coronavirus (COVID–19).

Hizo un llamado a los “ancianos, enfermos y mujeres embarazadas” a que continúen participando en las ceremonias religiosas por medios digitales, en radio o en televisión.

Aguiar Retes y la jerarquía eclesiástica establecieron que no deben asistir por ningún motivo al templo quienes presenten síntomas de Covid-19.

El sacerdote vulnerable, por salud o edad, debe decidir si participa o no en las celebraciones. Si decide participar, debe evitar estar cerca de los fieles y respetar las indicaciones que señale la Secretaría de Salud en torno a la situación sanitaria.

Antes de abrir los templos, se deben limpiar, sanitizar y fumigar las áreas donde estarán los fieles. Habrá un solo acceso para controlar el ingreso, los asientos deberán marcarse para respetar la “sana distancia”, la separación será de por lo menos 1.5 metros de distancia entre cada persona.

En las iglesias, será obligatorio el uso de cubrebocas: de lo contrario no podrán ingresar al templo.

Deberá haber en los accesos gel antibacterial, además, se les tomará la temperatura a los fieles y se les pedirá limpiar sus zapatos en una jerga con desinfectante antes de entrar al recinto para escuchar misa.