El movimiento Ansarolá amenaza con lanzar ataques de represalia en lo profundo del territorio saudí y promete poner fin al matonismo de Riad contra Yemen.
“Mientras el régimen agresor de Arabia Saudí sigue atacando los civiles, niños y mujeres inocentes yemeníes, Yemen no detendrá su operación estratégica contra Arabia Saudí y la seguirá en lo profundo del suelo del reino árabe”, ha aseverado este jueves Hazam al-Asad, miembro de la oficina política del movimiento popular yemení Ansarolá.
En una entrevista con la agencia iraquí de noticias Al-Maalomah, Al-Asad ha subrayado además que el Ejército yemení, apoyado por los comités populares pondrá fin al matonismo y agresiones de Riad y sus aliados en Yemen con sus operaciones de represalia.
En esta misma línea, ha remarcado que los ataques con misiles y drones que las fuerzas yemeníes lanzan de vez en cuando contra posiciones militares y petroleras saudíes, se producen en venganza del genocidio de civiles, así como de la sangre de combatientes yemeníes que han caído mártires por agresiones de la monarquía saudí y sus socios. Las fuerzas yemeníes han amenazado con intensificar sus asaltos de represalia contra Arabia Saudí y sus aliados regionales, si no ponen fin a la brutal campaña militar que llevan a cabo contra Yemen desde 2015, advirtiendo que sus misiles, de fabricación nacional, pueden alcanzar “objetivos estratégicos” en suelo saudí.
, así como en los Emiratos Árabes Unidos (EAU), principal socio de Riad.
La más reciente operación de represalia yemení fue lanzado el domingo pasado, cuando el Ejército y Ansarolá de Yemen lanzaron un masivo ataque con misiles y drones contra bases aéreas e instalaciones petroleras claves en regiones saudíes de Najran, Jizan, Asir y Abha.
Tras esa operación exitosa, el viceprimer ministro yemení de Defensa y Seguridad del Gobierno de Salvación Nacional, el mayor general Yalal al-Rewishan, aseguró que Yemen seguirá desarrollando sus armas y aumentará el alcance de sus misiles para lanzar ataques más fuertes y sorprendentes contra el enemigo saudí.