San Benito de Nursia, el santo patriarca de los monjes

San Benito de Nursia, cuyo nombre es llevado al menos en España por aproximadamente 19 mil 578 hombres, es conocido como precursor en Occidente de la fe y de la vida en monasterio, también es considerado patriarca de los monjes y patrón de Europa.
El nombre de este santo tiene su origen en el latín y su significado es “bondadoso”. Fue Nursia la ciudad italiana que lo vio nacer en 480.
Este santo nació para comprender qué significa la vida, misión que cumplió tras sufrir una ruptura amorosa que le destrozó el corazón, y cuyo desengaño fue el motor para que se centrara en sus estudios en Roma, donde se adentró a la literatura y a la filosofía; sin embargo, no sería esa la respuesta que buscaba para su vida, así que motivado por encontrarla se alejó del mundo, instalándose en Enfide y viviendo como si fuera un ermitaño.
Tras años de estudiar mucho, San Benito de Nursia, decidió vivir en el monte Subiaco donde tomó por hogar una cueva y fue orientado por medio de un ermitaño un tiempo, luego se fue a vivir con monjes de Vicovaro, aunque ese hogar no fue para él, pues lo eligieron prior y sus enemigos intentaron de envenenarlo.
Fue tras largo tiempo en soledad y aprendiendo de todo aquel que conocía que este santo logró crear en la montaña Cassino en el 529 su primer monasterio.
San Benito de Nursia es conocido por haber escrito la Regla, y tras su amplia difusión fue que se le conoció como el patriarca del monaquismo occidental, este santo fue fundador de muchos centros de cultura y formación, así como de monasterios que lograron difundir la fe aún en épocas difíciles para la religión católica.