El uso incorrecto de cubrebocas puede ser perjudicial: Gatell; dan “falsa seguridad”, dice Censida

La Secretaría de Salud alertó hoy que usar incorrectamente cubrebocas incrementa el riesgo de enfermar de COVID-19. Durante el informe diario sobre el avance del virus en el país la dependencia dio una serie de recomendaciones sobre el uso de las mascarillas.

“Quien quiera usar un cubrebocas que lo use, pero que tenga en cuenta que no es una protección total, si no se usa de forma correcta podría ser perjudicial”, dijo el Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.

El epidemiólogo reiteró que el uso de cubrebocas como una “solución total” para evitar contagios de coronavirus “no está sustentado en evidencia científica”.

En ese sentido se pronunció Alethse De la Torre Rosas, directora del Centro Nacional para la prevención y el control del VIH/SIDA (Censida), quien llamó a usarlos correctamente porque de lo contrario si efectividad disminuye y pueden generar una sensación de “falsa seguridad”.

“No hay nada más peligroso que sentirnos seguros con un elemento que no va solo y no funciona si no va acompañado de otras medias preventivas y su uso adecuado”, dijo.

La funcionaria dijo que es más recomendable mantener el constante lavado de manos o el uso de gel antibacterial.

“Nunca salgan sin alcohol gel. Podemos salir sin cubrebocas cuidando la sana distancia, pero es muy factible que se estén tocando la cara”, dijo.

Recordó que las personas que no presentan síntomas de coronavirus pueden usar las mascarillas, pero deben cumplir también con medidas sanitarias como respetar la sana distancia, realizar el estornudo de etiqueta y lavarse constantemente las manos.

De la Torre Rosas destacó que para usar cubrebocas las personas deben lavarse las manos antes y después de retirarlos, y esto debe hacerse tomando la mascarilla desde las esquinas. Si las mascarillas son desechables deben tirarse en una bolsa y si son de tela de lavarse diariamente.

Dijo que según el tipo de tela los cubrabocas es recomendable lavarlos a una temperatura de 60 grados o pueden desinfectarse con hipoclorito de sodio y al terminar hay enjuagar la sustancia para no inhalarla.