Sin guardarnos, crecerán casos

Por el bien de los potosinos

Los potosinos podemos superar el pico de la pandemia, solo si la tendencia de relajamiento en la reducción de la movilidad quedándose en casa, de la ciudadanía que ya la sigue, continúa así de aquí a que termine junio y no la abandona antes.
Por ello el gobernador Juan Manuel Carreras López, insiste en que a pesar de que para la ciudadanía no ha sido fácil acatar las medidas de distanciamiento, son necesarias para evitar que la situación se agrave más durante los días por venir, cuando será “el pico” gráfico de la pandemia en nuestra entidad y que, “las medidas no son para molestar, sino para cuidar a la población”.
Con todo y que lo más que alcanzamos fue reducir la movilidad al 51.4%, el sistema de salud permanentemente ha hecho re-proyecciones y re-cálculos de tal forma que el Plan de Reconversión Hospitalaria aún con esas “desatenciones” a quedarse en casa, no colapsará.
El problema, y muy serio, será si un grueso todavía mayor de la población, se suma a los que diario desafían al SARS-Cov2 y salen a cazar funerales, valiéndoles la vida de todos los demás, como la profesionista que en Tamazunchale, dejó su obligatorio confinamiento a sabiendas de que tenía Covid-19, y salió a festejar a las madres. No tuvo ídem.
Al momento aún hay 24 sospechosos de contagio. La señora no llega a los 40 años, es profesionista con un empleo fijo, así que no fue por ignorancia ni falta de recursos, tan irresponsable aptitud, igual que la del sacerdote de Abastos, intubado en un hospital privado, donde tal vez las imágenes de su devoción lo salven pero, ¿Qué necesidad de viajar en tiempos de Covid?

DESPISTADOS O POR

Simplemente por el lugar en que se encuentran, los legisladores de los partidos políticos, todos, debían comprender a cabalidad la emergencia sanitaria por que atraviesa SLP y que la posible solicitud de contratar endeudamiento por parte del gobernador, Juan Manuel Carreras, tiene como gran sustento, continuar con el combate frontal al Covid 19, que sigue devastando la salud de los potosinos y que no tiene fecha de caducidad, como si la tienen las finanzas públicas.
Es lamentable que en medio de una verdadera tragedia como la que estamos viviendo, se den posturas tan tontas, por no llamarlas de otra forma (cínicas al menos) de algunos legisladores que no se tentaron el corazón para seguir cobrando sus ofensivos sueldos (así los llamaron en campaña), sus millonarios seguros de gastos médicos mayores y medianos (en vez de irse al ISSSTE, como prometieron), en “repartirse” recursos y prebendas –poder- para contratar asesores, léase aviadores- y darse el lujo de engordar la nómina gubernamental del Congreso para abajo y más allá, pues nadie les niega nada.
En cambio la administración de Juan Manuel Carreras, en cinco años logró reducir los pasivos estatales de 21 mil 360 a 14 mil 747 millones de pesos, así que un crédito por 700 mdp, no parece substancial, sobre todo si la mitad se cubre rápidamente. Es decir: ha hecho su chamba, no hizo tal promesa pero él sí se redujo el sueldo.
Y en vez de promoverse, Carreras se preocupa más por atender la pandemia del COVID-19 y sus consecuencias financieras y económicas, que generaron gastos no previstos en el presupuesto del 2020, independientemente de la reducción recaudatoria por la inactividad económica en muchos sectores que no producen, no ganan y por ende, no contribuyen.

NO SON ENCHILADAS

Es hora que todos nos unamos en un solo frente por el bien de la población, no del gobernador, no de su partido político, sino de la salud y el hambre de un pueblo que tiene miedo de un enemigo desconocido, poderoso y mortal que además ha dejado sin trabajo, sin ingresos y con la moral por los suelos a miles.
Por otra parte vale resaltar la valiente y acertada, por la trascendencia que tiene, decisión de JMCL de no anunciar el reinicio de clases para junio y esperar a más seguridad, porque son más de 900 mil alumnos y alrededor de 49 mil docentes, quienes entrarían al umbral de un peligro innecesario, cuando pueden continuar su preparación por otras vías.
Deben considerarse varios aspectos, entre ellos que nuestro país tiene el mayor promedio de alumnos por grupo entre los países de la OCDE, alrededor de 30 en las escuelas que “se respetan” y aun así, es el doble de la media del conjunto de la organización.
Si en condiciones normales eso ya era un reto remanente de la reforma de Peña Nieto, imagínese ahora lo que tendrían que hacer profesores y directivos para aplicar medidas de sana distancia en salones atiborrados con casi 60 alumnos, como en el Cobach.
La salud de cerca de un millón de alumnos de educación básica y Media Superior no son enchiladas, debe estudiarse con mucho cuidado por las posibilidades de que la escuela se convierta en un foco de reemergencia de la pandemia y eso, son palabras mayores.
Reflejan el compromiso del gobernador para con las futuras generaciones y ante eso no caben politiquerías baratas ni revanchismos. Sobre todo cuando hasta hoy, no hay consenso científico comprometido sobre cuánto dura la inmunidad de alguien recuperado. ¿A qué los vamos a exponer?

REGRESAR O NO REGRESAR

Sea cuando fuere el retorno a la escuela, se va a requerir desde una capacitación del personal hasta el aprovisionamiento de sanitizantes, la distancia entre uno y otro pupitres y, ¿Sanitizarán los salones cada que entre un nuevo grupo? ¿Cuáles serán los protocolos de entrada y salida para las clases, al recreo, o los recesos? ¿Qué tan a menudo deberán descontaminarse las superficies con las que muchas manos entrarán en contacto?
Puede pensar que como los niños son menos propensos a enfermar gravemente por COVID-19, las clases debieran reanudarse ya, pero olvida que esos niños pueden contagiar a otros miembros de la familia, sobre todo porque muchos padres dependen del apoyo de abuelos o tíos mayores de edad para llevarlos a la escuela y/o traerlos de regreso a casa, darles de comer y apoyarlos en sus tareas. ¿Cómo va a operar esa logística sin que los pongan en riesgo?
Lo cierto es que hasta el día de hoy solo las empresas de auto partes, minería e industria de la construcción reinician operaciones mañana a primera hora, bajo los debidos protocolos de la contingencia sanitaria, supervisados por la Secretaría del Trabajo y las representaciones sindicales.
Esas medidas van, desde ropa completa que cubra cabeza y rostro, tapabocas N95, lentes transparentes, guantes, tomas de temperatura a la entrada y salida de los trabajadores, gel antibacterial, sanitización con ozono, y aplicación de pruebas de COVID19 cada semana que, está visto, reducen 85% el riesgo de contagios.

VIVOS LOS QUEREMOS

Si no es así, como invita el líder nacional Antorchista, Aquiles Córdoba Morán, salgan a protestar porque si bien se entiende que a todos los trabajadores les urge recibir dinero, también tienen el deber de velar por su salud y para las empresas es una obligación. Y no es un llamado anti AMLO, solo un recordatorio que a sus hijos les faltan v-i-v-o-s, muertos solo serán, si acaso, un buen recuerdo.

margarita_basanez@yahoo.com.mx