Ayúdenos con su caridad, con ese compartir, han vivido otros tiempos que gracias al trabajo de sus obreros ellos han adquirido un gran bien, para ellos sus familias, la empresa misma, es ahora de que también ellos nos apoyen; exhortó el arzobispo de San Luis Potosí, Jesús Carlos Cabrero Romero, luego de celebrar la Misa de Resurrección en la Catedral Metropolitana de la capital potosina a puerta cerrada, tal como se han llevado a cabo todos los eventos religiosos en las últimas semanas.
El jerarca reconoció que la situación que se vive actualmente en el aspecto económico es bastante preocupante no sólo para las empresas sino para los miles de trabajadores que encontraban en estos lugares sus fuentes de ingreso por lo que insistió en el llamado para que los empresarios no cierren sus negocios de manera indiscriminada, sin pensar en los trabajadores que, durante años, han trabajo para ayudarles a obtener algún beneficio.
«No es tiempo de egoísmos, ni de indiferencia como dice el Papa, no es tiempo de temores, es tiempo que nos juntemos, creamos o no en el mismo Dios, y veamos con una sola: causa el bien y el bienestar de nuestro querido San Luis» reiteró Cabrero Romero quien insistió en la necesidad de que haya empatía y solidaridad desde todos los sectores de la sociedad para poder enfrentar de manera apropiada la pandemia y los estragos que está generando.
Por último, reiteró el llamado para que todos los empresarios y agremiados que generan empleo a miles de potosinos no desesperen ni tengan miedo de lo que se avecina sino que sean comprensivos y busquen la manera de apoyar a los trabajadores que, durante años, han sido incondicionales y se han esforzado para dar lo mejor de sí en aras de impulsar el crecimiento y desarrollo económico de las empresas y de San Luis Potosí en general.