Regidora pide que se pare la construcción del puente en Bulevar Rocha Cordero

  • Ana Pineda Guel, afirmó que se está exponiendo a los trabajadores al contagio del Covid-19

Es lamentable que el ayuntamiento de Xavier Nava en conjunto con el gobierno estatal haya iniciado la obra del puente del bulevar Rocha Cordero cuando no es ninguna prioridad en esta contingencia ambiental y fue una licitación a modo y con el moche respectivo, aseguró la regidora del PRD, Ana Pineda Guel.

“No se puede poner en riesgo a los trabajadores, es una acción imprudente y que los expone con alevosía a los riesgos del contagio del virus Covid-19, es resultado de la mezquindad y la ambición del alcalde Nava, del director de Obras, Marco Antonio Uribe Ávila y la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción”.

La regidora puso como ejemplo que el sector productivo no esencial en esta emergencia sanitaria ha parado labores como armadoras de autos y fabricantes de cerveza, “aquí se esté actuando como si no pasará nada y le dan el banderazo a una obra que en estos momentos no urge y sabemos cómo se las gasta Uribe Ávila, al que solo le importa el moche”.

Reiteró que todas las obras municipales que se han asignado han sido de manera mañosa, a modo, “de cobro de moche a constructores afiliados a la CMIC, la cual que dirigida por el propio Uribe Ávila, esto es indignante”.

Dijo que cae en la burla Uribe Ávila al señalar que el puente del bulevar Rocha Cordero es una obra prioritaria, indispensable para los potosinos, cuando sabemos que no van a cumplir con el plazo establecido por la contingencia, además de la corrupción que la distingue, y no va a ser inaugurada por esta administración de Nava.

“El único interés es que las constructoras cobren para que el recurso no se devuelva y en el municipio reciban el moche respectivo, así se las gasta Uribe Ávila”.

Lo único que le pedimos al alcalde Nava y al gobernador Juan Manuel Carreras que tengan un poco de sensibilidad, “no puede ser que inicien esta obra en esta crisis de salud pública, lo mismo en el caso de la licitación de luminarias, en la que se embolsaron 400 millones de pesos, la ambición está por arriba de cualquier consideración, lo cual es reprobable”, concluyó Pineda Guel.