La razón por la que no debes mojar un sartén caliente

  • La mayoría de las personas suelen poner las sartenes calientes en el fregadero justo después de retirar los alimentos, lo cual, no está bien, ya que a la larga puede causar efectos secundarios

Es probable que hayas notado que últimamente a tu sartén se le pegan las cosas o que se tambalean al contacto con el fuego… Si tu respuesta es sí, hoy te vamos a revelar por qué no debes poner una sartén (caliente) debajo del agua. (Conoce la razón por la que no debes lavar tus sártenes con jabón). 

La mayoría de las personas suelen poner las sartenes calientes en el fregadero justo después de retirar los alimentos, lo cual, no está bien, ya que a la larga puede causar efectos secundarios en sus sartenes.

Al poner una sartén caliente debajo del agua fría ocurre que sufre un choque térmico, es decir, algo que perjudica a este utensilio, pues no sólo no calentará adecuadamente, sino que se puede deformar y agrietas dependiendo de su calidad de fabricación.

 

Al deformarse su base quedará desnivelada y no estará “estable” al calentarse, pues tendrá unas zonas muy calientes y otras muy frías cada vez que lo utilices.

Otra cosa que ocurre es que el metal se expande al calentarse y se contrae al enfriarse; a esto se le conoce como dilatación térmica y una razón más para evitar hacer el choque de temperaturas. Lo recomendable es esperar a que tu sartén se enfríe por completo a temperatura ambiente.

 

 

Si la sartén se templa poco a poco, recuperará su tamaño original sin problemas. A veces la deformación es temporal y la sartén recupera su forma a medida que se enfría, sobre todo si la sartén es elaborada de un material resistente.

En otros casos, la deformación es permanente, sobre todo si está hecha con un material de menor calidad. Sin embargo, el riesgo de deformarse siempre existe cuando agregas agua.

 

Foto: Pixabay

 

A continuación, te revelamos cómo limpiar tus sartenes de pendiendo el material con el que están elaborados:

1. Acero inoxidable

Deja que la sartén se enfríe por algunos minutos y después talla con ayuda de una esponja para retirar cualquier exceso de comida.

Si tiene algunos pedazos quemados, es probable que requieras de jabón quita grasa o de una esponja más dura o bien, intenta con un poco de bicarbonato de sodio y ponla a calentar mientras tallas con ayuda de una cuchara de madera. Retira el exceso con un paño seco.

 

 

2. Antiadherentes

Utiliza habón líquido y una esponja suave; sino sale la suciedad, lo que puedes hacer es fregarla con un poco de agua tibia y jabonosa. Evita aquellos productos con lejía o ácido cítrico.

 

 

3. Hierro fundido

Es mejor dejarlos enfriar completamente antes de lavarlos o ponerlos a remojar; evita usar jabón (pues lo requiere este material) y solo emplea un cepillo duro, así como agua caliente. Seca después de lavarlo y de esta forma evitarás que se oxide.

Foto: IStock