Comerciantes ambulantes que el pasado 12 de febrero fueron desalojados por inspectores municipales cuando pretendían instalarse en la Calle de Manuel José Othón esquina con Zaragoza, se manifestaron a fin de exigir que se les permita trabajar en esta temporada del 14 de febrero, fecha en que se celebra el “Día del Amor y la Amistad”, argumentando que la venta para esta celebración es toda una tradición sobre todo en la zona del centro anteriormente referida recisaron que dicha tradición cuenta con al menos 40 años de llevarse a cabo año con año.
Elizabeth Navarro, quien es una de las comerciantes afectadas, explicó que sobre esa calle ella personalmente ya lleva más de 20 años trabajando de manera tradicional, e indicó que cuenta con los recibos correspondientes, señalando además que a diferencia de otros comerciantes ambulantes que fueron reubicados, no piensa aceptar ser reubicada ya que trabajar en ese lugar es un derecho que se han ganado con el correr del tiempo, enfatizando en que están de acuerdo con que se les asigne una cuota y a pagarla, aunque según precisó, todo parece indicar que más bien se trata de un problema personal que tiene en su contra la titular de la Unidad de Gestión del Centro Histórico, Rocío Zavala.
Por su parte, Alma Rosa Muñoz, quien es otra de las comerciantes que fueron desalojadas, expresó que es una contradicción que mientras que el gobierno municipal anda poniendo a la gen-te a tapar baches, para lo cual debe de existir un presupuesto, mejor utiliza los recursos para mandar a reprimir a los comerciantes, y refirió que así como el alcalde estuvo a favor de la pirotecnia por considerarla tradicional, debería de sensibilizarse y permitir este tipo de ventas que también son tradicionales.
