Con un nombre aún por definirse, el próximo auto compacto de Tesla, posible rival del Volkswagen ID.3, sería el primer proyecto a concebirse en su centro de I+D en dicho país oriental, movida que es consecuente a la nueva fábrica en Shanghai que a un ritmo de medio millón de unidades anuales ya produce el Model 3, al que se le unirá eventualmente su derivado crossover, el Model Y.
Tesla no solamente prevé crecer en China con su actual portafolio, sino generar productos adaptados al estilo y necesidades locales. Tan relevante es el futuro compacto, que la publicación del bosquejo de lo que será se dio a través de la red social WeChat, la más grande de China.
Otros Tesla pendientes de momento, teniendo en cuenta que la marca tiene la costumbre de presentar sus vehículos unos tres años antes de que empiecen a rodar por las calles, son su camión, la pick-up Cybertruck o la segunda generación del Roadster.
